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Benidorm

Los dueños del nuevo rastro amenazan con denunciar al Consistorio por prevaricación

Los propietarios aseguran que se les está negando la licencia de obra cuando cuentan con todos los informes favorables «por una cuestión política»

Los dueños del nuevo rastro amenazan con denunciar al Consistorio por prevaricación

Los propietarios del nuevo rastro-mercadillo que quiere instalarse junto a la zona de las discotecas en Benidorm tienen la intención de denunciar tanto al alcalde de este municipio, Toni Pérez, como a la concejal de Urbanismo, Lourdes Caselles, por una supuesta prevaricación, al no concederles ya la licencia de obra que demandan.

Así lo aseguró ayer a este diario José María Miranda, representante de los promotores de esta iniciativa que ha puesto en pie de guerra a la principal asociación de comerciantes de la ciudad, Aico. Hace un par de semanas, la edil de Urbanismo, ante la misma amenaza, no tuvo más remedio que concederles la licencia medio ambiental, debido a que, según ella, todos los informes, hasta la fecha, tanto del Consistorio como de Conselleria, eran favorables para la puesta en marcha de este negocio.

En la pasada sesión plenaria, la corporación votó de manera unánime una propuesta de Liberales y Ciudadanos (C's) en la que se proponía que todas las licencias que se fueran a otorgar a este rastro se sometieran a consideración del pleno y de la junta de portavoces. Aunque, en todo caso, la última palabra, a día de hoy, la tendría la concejala delegada -Lourdes Caselles- o el alcalde si le quitara la competencia.

Miranda afirmó a este diario que «nos están negando darnos ya la licencia de obra porque dicen que se trata de una cuestión política, cuando nosotros consideramos que esto no tiene por qué pasar por el pleno, sino que es potestad del alcalde y de la edil de turno». Por esta razón, subrayó que los holandeses que están al frente de este negocio pretenden presentar una denuncia contra los que ellos consideran que son los responsables: Lourdes Caselles y Toni Pérez.

Ante estas declaraciones, el alcalde de Benidorm recalcó a este diario que no se siente amenazado y que «en ningún momento» se le ha indicado a este representante de los propietarios del rastro que se les esté negando la licencia de obra por una cuestión política. «Yo simplemente tengo que atender a lo que se votó en el pleno y someter a la consideración de la corporación los trámites en relación a esta licencia», manifestó.

El primer edil reseñó que tampoco se ha sentido amenazado por estos empresarios y que no le consta que hayan recurrido esta aprobación en la última sesión plenaria.

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