Las futuras mamás residentes en la Marina Baixa que quieran tener a su hijo en el hospital público de la comarca están en desigualdad de condiciones según la hora a la que se ponen de parto. Llevan así ocho años, desde que se empezó a suministrar en este centro. El problema está, según explicaron varios sanitarios a este diario, en que cuando empieza el turno de guardia, a partir de las 20 horas, sólo disponen de un anestesista. Así, desde ese momento hasta las 8 de la mañana, es decir, durante 12 horas, este especialista tiene que estar pendiente de los casos de urgencia que puedan surgir por la noche. Y en la actualidad, el dolor de la madre a la hora de dar a luz no se considera como tal.
El Hospital de la Marina Baixa ofrece charlas informativas a las parturientas en las que se les hace partícipes de la realidad. Son obligatorias para todas aquellas que quieran que le pongan la epidural. En ellas, les comentan cómo está la situación. La solución que les dan, ante el hipotético caso de que necesitaran la anestesia por la noche, es que, bajo su responsabilidad, vayan en coche hasta los hospitales públicos de San Juan y Alicante, donde el más cercano está alrededor de una hora en carretera. Allí, tendrían que atenderles por obligación y sin tantos problemas para la epidural, aunque también podría haber complicaciones según la actividad que en ese momento estén desarrollando.
Pero con todo ello también se arriesgan a llegar a estos centros y que sus síntomas sean una falsa alarma y, como consecuencia, terminen mandándoles a su hospital de referencia o a casa porque no están de parto. O por el contrario, que ya haya pasado el momento justo en el que es necesario que se le ponga la epidural. Y es que, según detallaron fuentes hospitalarias, la anestesia se pone cuando la madre está entre 2 y 4 centímetros de dilatación, más tarde no.
Si no optan por el éxodo, les toca esperar en los últimos días de embarazo invocando a la suerte para que no la necesiten a partir de las 19 horas, que es cuando comienzan a tener las primeras reticencias. El caso es que el sanitario que tiene que ponerle la epidural, debe de supervisar a la madre durante un tiempo, por lo tanto, hay a algunas de ellas a las que en el momento del ingreso les dicen que a partir de las siete de la tarde no hay epidural, según ha podido saber este diario por un caso reciente. Y tal y como confirmaron los tres centros citados, en ningún momento se derivan pacientes a otro centro por este motivo.
Desde el Hospital Marina Baixa reconocieron a este diario que desde las 20 horas hasta las 8 de la mañana «sólo se puede garantizar la prestación de la epidural si la actividad lo permite». Por las mañanas cuentan con dos anestesistas, siendo uno de ellos el que se dedica, entre otros trabajos, al de poner la epidural. Si bien es cierto que otras fuentes consultadas afirman que hay casos aislados en los que se hace una excepción y se atienden hasta las 22 horas.
Quejas de las embarazadas
Además, informaron que el Servicio de Atención al Paciente del Departamento de Salud tiene registradas 34 quejas por este motivo en el periodo de un año, días en los que hubo 802 partos vaginales.
Según fuentes sanitarias, el Hospital de la Marina Baixa no tiene derecho a un segundo anestesista de guardia porque el número de éstos está limitado por el ratio del centro que exige Conselleria. No obstante, explicaron que en el caso de que se hiciera finalmente la ampliación de las instalaciones, sí que podrían optar a incrementar la plantilla de estos especialistas.
La importancia de este problema viene más allá, incluso si se tiene en cuenta los datos que barajan diversas fuentes, que dice que el 60% de las mujeres dan a luz con epidural.
