El equipo de gobierno municipal de Altea, formado por la coalición entre Compromís, PSOE y Altea amb Trellat, ha solicitado al Consell que medie para que no se lleve a término la variante de circunvalación de la N-332 después de que el Gobierno español haya anunciado oficialmente que en 2019 se liberalizará la autopista AP-7. Así, el pasado jueves por la tarde, el alcalde de la localidad, Jaume Llinares (Compromís) y el resto del equipo de gobierno aprovecharon un encuentro con el presidente de las Cortes Valencianas, Enric Morera, que tenía como fin analizar cuestiones que afectan a la localidad, para realizar esta petición.

Llinares, por su parte, señaló que el municipio es contrario a la circunvalación de la N-332 «porque estrangularía todavía más la localidad», y recalcó que con la liberalización de la AP-7 «esta vía sería la circunvalación, para lo cual se va a elaborar un proyecto para conectar la parte sur de Altea con el interior de la comarca, con un vial que salga desde la rotonda del Club de Tenis hacia la carretera de la Carbonera que enlaza la carretera de Altea-La Nucía con L'Alfàs».

Problemáticas

Asimismo, en el encuentro con el presidente de las Cortes se abordó también la problemática del municipio en materia de infraestructuras viarias, educación y otras cuestiones como el futuro de la Cala del Soio.

Tras el encuentro, Morera afirmó que «haremos todo lo posible para ayudar al Ayuntamiento de Altea desde las Cortes en las peticiones de Llinares y su equipo», y añadió que «estudiaremos la posibilidad de dotar de presupuesto autonómico a los BIC del municipio».