Los bañistas más pequeños disfrutaron ayer de una piscina natural en la cala del Mal Pas de Benidorm que, según explicó el edil de Playas, Lorenzo Martínez, se formó la noche anterior por los temporales. Fue el atractivo de los niños que vieron en ella un lugar en el que refrescarse sin olas y donde el agua les venía por los tobillos a la mayoría. Tal y como informó Martínez, tenían previsto que anoche pasaran los vehículos encargados de distribuir la arena de las playas cada día y así nivelarla de nuevo. Este fenómeno se podía ver en otros puntos de las playas de Benidorm.