El alcalde de Benidorm, Toni Pérez, anunció ayer la congelación de los valores catastrales de todo el término municipal en 2016, al no solicitar la aplicación de los coeficientes de actualización de los valores catastrales para el año que viene.

Esta medidad se comunica a tres días del límite -31 de julio- que tiene el Ayuntamiento para solicitar por escrito si lo desea a la Dirección General del Catastro, la actualización anual de los coeficientes, que puede aumentar hasta un 10 por ciento anual el valor catastral del municipio.

En la práctica esta congelación implica que impuestos como el IBI no experimenten ningún aumento el próximo ejercicio y se mantengan, según subrayó el alcalde, Toni Pérez. En 2016 el tipo impositivo del IBI continuará al 0,682, como este año 2015. El alcalde destacó, asimismo, que la medida no se notará tanto en el IBI como en los impuestos de patrimonio, el de plusvalía y parcialmente afectará a la Declaración de la Renta. En 2014 y 2015 sí se pidió esa actualización de los coeficientes, lo que supuso que «en dos años el valor de las viviendas e inmuebles de Benidorm haya crecido un 20 por ciento, a razón de un 10 por ciento en cada ejercicio. No así el IBI, ya que su subida se compensó con una bajada del tipo impositivo del IBI en la misma proporción», explicó Pérez.

Toni Pérez manifestó el compromiso de su gobierno en «revisar algunos impuestos, en la medida que lo permita el estado de las arcas municipales», con el fin de «hacer más con menos, recuperar la economía municipal y devolver a los ciudadanos el esfuerzo que han hecho para que el Ayuntamiento de Benidorm superase la difícil situación económica que atravesaba», destacó el alcalde.