El Ayuntamiento de Benidorm ha rescindido el convenio de colaboración social con el Servicio Valenciano de Ocupación y Formación (Servef), al que están adscritos 33 trabajadores del Consistorio. El objetivo es corregir, según afirmaron ayer los populares, «un desfase presupuestario de 22.000 euros a fecha del 30 de junio». Tal y como declararon, «de haberse renovado automáticamente el convenio, como tenía previsto el anterior equipo de gobierno», dicho desfase superaría a final de año los 42.000 euros, incumpliendo así el Plan de Ajuste y obligando a ampliar la partida presupuestaria anual, señalaron.

El concejal de Gestión de Recursos Humanos, Jesús Carrobles, anunció que el nuevo convenio con el Servef se aprobará con ajustes los próximos días y que, como consecuencia, se reducirá el personal contratado en casi una decena de trabajadores («en más de 8») -pasará de 33 a 21 o 25 personas, según se baraja-. Los puestos de los trabajadores que perderían su empleo se «tratará de que sean cubiertos por funcionarios», según explicó el edil. Algunos de estos empleados desempeñan funciones en diversos servicios locales, como es el caso de varios conserjes en centros educativos o conductores de camiones municipales, entre otros.

El responsable de Recursos Humanos advirtió que «durante unos días, algunos servicios del Ayuntamiento se van a ver mermados», por lo que pidió «comprensión» .

Este tipo de contratación está dirigida a ayudar a personas de difícil inserción laboral, como los mayores de 55 años, para que, según el edil, «entre la ayuda del Servef y la del Ayuntamiento pudieran percibir un salario digno». Asimismo, el portavoz del equipo de gobierno, José Ramón González de Zárate, lamentó que «el espíritu de esta ayuda se haya desvirtuado, dado que algunos beneficiarios alcanzaban sueldos de hasta más de 1.500 euros, lo que ha producido este importante desfase presupuestario». El portavoz del Ayuntamiento aseguró que el nuevo gobierno no incumplirá el presupuesto municipal ni el Plan de Ajuste, superando el tope previsto para este convenio, que se sitúa en los 300.000 euros anuales. Y criticó «los desfases de hasta 700.000 euros que se han producido desde 2010».

Por su parte, el portavoz del grupo municipal socialista, calificó de injusta la rescisión del convenio hacia los trabajadores que, dijo, «han desarrollado una labor extraordinaria para el Consistorio y ahora se quedan sin trabajo» y puntualizó que se trata de personas con muchas dificultades de inserción laboral, que se van a quedar «desprotegidas». Además, aseguró que el desfase presupuestario se podría haber corregido «con las jubilaciones de algunos trabajadores» y destacó que «si ya era complicado cubrir bajas en determinadas situaciones, como en puestos de conserjes» no saben «cómo se solucionarán estos imprevistos con 13 o 14 trabajadores menos».