Un foro sobre jurisdicción universal ha traído este fin de semana a l'Alfàs del Pi al jurista Baltasar Garzón, además de a otros expertos internacionales, para participar en las jornadas «Caminos para la paz», un encuentro en el que se pretende sentar las bases para el II Congreso de Jurisdicción Universal que se celebrará en Argentina en noviembre. En este foro participa, igualmente, Johan Galtung, matemático y sociólogo noruego afincado en l'Alfàs, y también referente en la mediación internacional de conflictos.

Antes de pronunciar una conferencia por la tarde en la Fundación Frax, el exmagistrado español contestó las preguntas de la prensa. Sobre los casos de corrupción, señaló que «España es uno de los países con más leyes contra la corrupción y que menos se respetan». En su análisis, Garzón trasladó que desde la Transición «se tardó tiempo en percibir» que podía existir corrupción política; después «hemos visto mecanismos que no se han consolidado». Habló de transparencia y también subrayó que en muchos años no ha habido una «verdadera intención de prevenir», ni una «línea institucional clara contra la corrupción», lo que hubiera evitado que procesos, como los actuales, llegaran a los tribunales.

Estos, diagnosticó, están «cargados» de causas y casos «con complejidad» y que resuelven «en el tiempo razonable dentro de lo que se exige». Precisamente, la fundación Pro derechos Humanos y Jurisdicción Fibgar que preside -y como tal participa en estas jornadas- apuesta por «avanzar» en la definición de los crímenes económicos internacionales como de lesa humanidad, según expuso. Delimitando este aspecto -que también apoyan Galtung y este foro de jurisdicción universal- se incluirían la explotación de los recursos naturales, la explotación infantil en la extracción de esos recursos naturales o las «imposiciones masivas» a países para la compra de deuda, por ejemplo.

Garzón sostuvo que la definición de estos crímenes económicos internacionales permitiría «proteger» a las víctimas, que son millones en el mundo -dijo- y que «sin poder evitarlo, se encuentran abocados a una situación límite». Abundando en este aspecto, Galtung apostilló que «hay que identificar a los actores económicos malos y castigarlos», para añadir que hay que «cambiar el sistema» porque el actual permite a los bancos «especular con el dinero de todos». En otro momento del encuentro con la prensa, el jurista español subrayó que «no puede ser tolerado» que en «España más de un 22% de la población esté en riesgo de pobreza».

Al ser preguntado por el perdón que el lehendakari, Íñigo Urkullu, pidió ayer a las víctimas del terrorismo, el exmagistrado -que en su día como juez de la Audiencia Nacional investigó causas sobre terrorismo, terrorismo de Estado, narcotráfico, corrupción política o delincuencia económica- indicó que «pedir perdón a las víctimas siempre es positivo».