Los trabajadores de Emaús decidirán hoy el futuro de la acampada de protesta que mantienen en la plaza del Ayuntamiento de Altea desde el 26 de mayo. La decisión dependerá de la reunión que tendrán este mediodía con el administrador concursal nombrado por el juez tras entrar esta ONG en un concurso de acreedores el pasado día 27.
Ayer por la mañana se celebró en la plaza del Ayuntamiento una manifestación donde los trabajadores hicieron una cadena humana con muñecos de papel simbolizando a los niños que atiende la asociación y que se quedarían sin esa atención. En un manifiesto responsabilizaron al Consell «de permitir que esta situación se haya convertido en una amenaza real para mujeres víctimas de maltrato y menores desamparados». Al actual equipo del Consell le pidieron que se pronuncie sobre el caso Emaús «antes de dejar sus competencias». La principal preocupación de los trabajadores son los menores y las mujeres maltratadas que atienden ya que, hasta el día de hoy, «han podido atender sus necesidades básicas gracias a las donaciones altruistas de colectivos locales y extranjeros que están aportando dinero y especies», aseguraron. Ayer también denunciaron que Emaús «nunca ha sido transparente ni ha mostrado sus cuentas al comité de empresa a pesar de ser un derecho regulado por el Estatuto de los Trabajadores» y se preguntaron por el destino del dinero público. Según los representantes sindicales, «el futuro de las mujeres maltratadas y los menores en desamparo sigue siendo una incógnita».
