Después de cuatro años durmiendo el sueño de los justos, el Ayuntamiento de Benidorm sacó ayer del cajón un proyecto para crear el centenar de huertos urbanos que en el año 2011 llegó incluso a adjudicar en una parcela de la avenida de Nicaragua, junto al barranco de Xixo. Así lo anunció ayer el edil de Medio Ambiente, el socialista José Marcet, quien abandonará el Consistorio tras las próximas municipales y ayer reconoció que no quería marcharse sin recuperar esta iniciativa, que el gobierno local se vio obligado a aparcar como consecuencia de la crisis.

«En su día no pudo ver la luz por las dificultades económicas por las que atravesaba el Ayuntamiento, pero la mejoría actual de las arcas municipales ha hecho posible la aprobación de 10.791,69 euros para la adecuación de estos huertos», dijo Marcet, quien además avanzó que estos trabajos se iniciarán la próxima semana y consistirán en el desbroce y limpieza, vallado de parcelas e instalación de puntos de agua para el riego.

El proyecto se desarrollará sobre un terreno municipal de 2.000 metros cuadrados, en el que se distribuirán 50 parcelas de 40 metros cuadrados cada una, y donde el Ayuntamiento ya hizo una primera actuación en 2011 que después fue en balde. Su filosofía es recuperar espacios para el uso del cultivo agrícola tradicional, «integrando urbe y naturaleza, y mejorando así la calidad de vida de sus ciudadanos», tal y como recordaron ayer desde el Consistorio. Los huertos deberán ser utilizados para uso exclusivo agrícola y con métodos de cultivo 100% ecológicos, además de estar dedicados al consumo particular, quedando prohibida su comercialización.

El Consistorio avanzó ayer que se «respetarán las condiciones redactadas en el convenio marco que ya se firmó en 2011 y que regula las normas de funcionamiento» y que, asimismo, mantendrá la adjudicación a los mismos usuarios que resultaron beneficiarios en 2011.