Nueve meses después de aprobar en pleno un acuerdo para retirar la condición de agente urbanizador del plan parcial Armanello al constructor Enrique Ortiz, imputado en varias presuntas tramas de corrupción, el pleno del Ayuntamiento de Benidorm volverá el próximo martes a las andadas. El edil de Urbanismo, el socialista Rubén Martínez, elevará una moción para iniciar de nuevo el expediente, después de que el primero -promovido por los liberales al frente de esta concejalía- caducara por retrasos municipales en distintos trámites del procedimiento.

El sector Armanello, proyectado desde el año 2001, abarca una superficie de 667.000 metros cuadrados, en los que estaba prevista la edificación de 3.600 viviendas, y representa el mayor plan parcial aún por desarrollar en Benidorm.

La nueva propuesta vuelve a incidir en los cambios sustanciales realizados por Ortiz sobre el proyecto con el que obtuvo la concesión, principalmente la retirada de los 17,5 millones de euros que comprometió aportar como mejoras y que después retiró a raíz de dos sentencias del TSJ que anulaban las elevadas cargas de urbanización que el constructor quería repercutir en los propietarios del suelo. Además, la moción también deja la puerta abierta a plantear cambios en el desarrollo de este sector para adaptarlo a las nuevas necesidades urbanas que han surgido en la ciudad a lo largo de estos quince años.

La Estación se encalla

El PSOE también quería elevar a pleno la aprobación definitiva del convenio con Ortiz para legalizar el exceso de obra de la estación de autobuses y sacar de nuevo a concurso la explotación de la terminal. Sin embargo, el PP advirtió ayer de que no existe el informe preceptivo del interventor municipal ni tampoco el proyecto de legalización de la misma y exigió que el asunto se deje sobre la mesa. El edil de Urbanismo dijo que dicho informe no está elaborado el lunes, aplazará la moción.