Juan Ramón Martínez, concejal de Limpieza Viaria del Ayuntamiento de Benidorm, ha defendido hoy ante la juez del Juzgado de Instrucción número 2 de Benidorm que los contratos realizados por el alcalde en 2010 y 2011 se hicieron para «cubrir necesidades del servicio» municipal y estuvieron siempre «amparados en la legalidad».

El edil socialista, que era responsable municipal de Recursos Humanos entre los años 2009 y 2011, cuando se produjo el grueso de los contratos supuestamente irregulares denunciados por la Fiscalía y el sindicato SPPLB, ha declarado en calidad de testigo en el marco de la investigación por la que el alcalde de la ciudad, Agustín Navarro, está imputado por presuntos delitos de prevaricación, tráfico de influencias y malversación de caudales, a raíz de una denuncia del Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB), que derivó en otra por parte de la Fiscalía.

Martínez ha indicado que cuando en 2011 un informe de Intervención advirtió de que había una desviación presupuestaria en el capítulo de Personal, «se tomó la decisión de no renovar el contrato los trabajadores que se había contratado para la vigilancia de las playas y de instalaciones deportivas» y también ha defendido los procesos de promociones internas que beneficiaron a determinados funcionarios, al elevar su categoría laboral.

Según ha explicado a su salida de los juzgados, Martínez ha expuesto ante la juez que este sindicato «sólo ha denunciado un proceso de promoción interna de los 16 o 20 que se hicieron» y, como ya hizo días atrás la defensa del propio alcalde, ha explicado que estos procesos beneficiaron a alrededor de un centenar de funcionarios, de los cuales sólo seis tenían vínculos directos con el Partido Socialista. Según Martínez, «había simpatizantes del PSOE, pero también del PP, de Izquierda Unida y seguro que había funcionarios apolíticos que llevan 30 años en la casa».

Por ello, ha calificado de «treta» y «complot contra el alcalde» la denuncia interpuesta por el SPPLB y ha dicho estar «convencido de que se trata de una maniobra total del PP para cargarse de un plumazo al candidato del PSOE». Por último, también ha defendido que, desde que Navarro es alcalde, la plantilla municipal se "ha reducido en 200 funcionarios" y "el déficit municipal", en 40 millones de euros.