Más de 20 escritos durante 10 años son los que los vecinos de la calle Doctor Álvaro Esquerdo han presentado en el Ayuntamiento para que solucione el problema que tienen con sus canalizaciones, que provoca humedades en gran parte de sus casas así como en otras de vías paralelas. Sobre todo, las que dan al cauce del río Amadorio.

De hecho, varios de los propietarios de esta calle se han constituido en asociación para hacer más presión en el Consistorio, de cara a que solucionen su demanda, que han elevado incluso a la Sindicatura de Gregues.

Francisco Lloret, secretario de la agrupación vecinal de Limones, explica que los principales problemas que tienen son las canalizaciones del agua potable y las pluviales. «Las primeras porque no tienen la profundidad necesaria. No llegan a 50 centímetros y la normativa marca mucho más. Además, los recanteos no se respetan. Pasan muy cerca de las casas. Eso provoca filtraciones. Asimismo, los materiales de las tuberías no son los adecuados», argumenta Francisco Lloret.

Si embargo, el tema de las pluviales cree que es el principal conflicto. Según su versión, las alcantarillas tienen un grave deterioro por su antigüedad y mezclan pluviales con aguas fecales. «El agua de la lluvia se recoge por el propio alcantarillado, lo cual provoca pérdidas importantes que derivan luego en humedades gigantescas en determinadas viviendas», afirma este vecino.

Él mismo, que vive en una calle más abajo, tiene paredes carcomidas por la humedad por todos los departamentos de su casa. Varios inmuebles que pudo visitar este diario también cuentan con importantes filtraciones, que sus propietarios tapan como pueden, ya que de momento el Ayuntamiento no parece haber encontrado la fórmula para solucionarlo.

La versión del concejal de Urbanismo de La Vila Joiosa, Jerónimo Lloret, es que no es cierto que el agua de las pluviales y las fecales circulen por el mismo sitio. «Desde hace mucho tiempo, hay tres imbornales y a través de ellos derivamos el agua de la lluvia al cauce del río», asegura el concejal, aunque matiza que «otra cosa es que las tuberías estén viejas, ya que nos encontramos en una zona antigua de La Vila, y puedan padecer algunas filtraciones».

Jerónimo Lloret aclara que el plan de inversiones de Hidraqua contempla el cambio de estas canalizaciones, «pero de momento no hay una partida prevista o actuación inminente para esta calle», precisa.

Un estudio en 2005

El propio secretario de esta asociación vecinal, Francisco Lloret, asevera al respecto que algunos técnicos de Aquagest -ahora Hidraqua- realizaron informes sobre estas canalizaciones en 2005 y detectaron multitud de roturas de tuberías, juntas en mal estado, acometidas obstruidas, etcétera. En definitiva, aspectos que hacen que, para este problema, siga lloviendo sobre mojado.