Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Despedida de una vida «muy perra»

Encuentran un nuevo hogar a 44 canes y 27 gatos de la perrera de l'Alfàs tras el decreto de cierre

Despedida de una vida «muy perra»

Cuando uno escucha los testimonios de varias personas o agrupaciones animalistas que han pasado por la Asociación Auxilio de Animales de L'Alfàs del Pi, tiene la sensación de que le están describiendo una especie de cárcel tercermundista para perros y gatos. Animales desnutridos, sucios, con enfermedades, viviendo en espacios con techados mínimos para refugiarse de la lluvia... son algunos de los detalles más desoladores de los relatos de representantes de diversas asociaciones animalistas de la comarca, que desde el lunes llevan buscando un nuevo hogar para todos estos -subrayo- seres vivos.

Una perrera a la que el Ayuntamiento, a principios de mes, decretó el cierre de sus instalaciones, al parecer, ateniéndose a informes del Consell y el Seprona que las califican de inadecuadas, según argumentaron fuentes de estas agrupaciones.

Ayer ya eran 44 los perros a los que les habían encontrado un nuevo hogar, de un total de 68. Los 27 gatos que quedaban también están colocados. No obstante, al mediodía, en sus instalaciones se respiraba un ambiente tenso. Su propietaria prefería no hablar con este periódico y sus trabajadores dejaban claro que los animales estaban bien alimentados, y que recibían la revisión de un veterinario voluntario de la zona. Algunos activistas, con un talante extremista, habían pintado la palabra «Asesinos» en el muro de fuera.

Este diario pudo observar cómo sacaron a uno de los canes: asustado, sucio, con restos de magulladuras en el cuerpo... También contempló las fotos de otros, ya trasladados a diferentes protectoras, con tumores o leishmaniosis canina. Rita Ringdal, de la asociación de L'Albir Los Perros de España, aseguraba que la gran mayoría de los que salen de allí tienen enfermedades -entre ellas diarreas por una mala nutrición- y están muy sucios. «Hay una voluntaria que se ha ofrecido a lavarlos y hay algunos a los que les ha tenido que dar tres pasadas. El olor nos decía que era insoportable», declaró Ringdal, que desde su colectivo se ha encargado de enviar perros de este centro a diferentes puntos de Escandinavia.

Además de la de Ringdal, han colaborado, entre otras, la Asociación para la Defensa de los Animales de Altea, la Protectora de Animales de La Nucía, la Asociación de Propietarios de Perros de L'Alfàs, la Protectora de Animales de Benidorm, Asoka de Alicante y otra agrupación inglesa que ha mandado canes a Reino Unido para que sean adoptados.

Fuentes de estos colectivos, que prefirieron guardar el anonimato, detallaron que no entienden cómo esta perrera ha recibido subvenciones municipales durante los últimos años «y no parecen haber invertido demasiado en que los animales se encuentren en las condiciones correctas».

El PP, a principios de mes, denunciaba que el PSOE ha destinado, en los últimos siete años, más de 100.000 euros de subvención a este centro de auxilio. Las mismas fuentes antes citadas vinculadas a las agrupaciones animalistas, señalaron que «esto no es un problema con color político. Esto es un asunto que lleva años coleando. El mérito, al final, es de las asociaciones, que son las que llevan tiempo peleando por el cierre».

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats