Sólo ha llovido a gusto de unos pocos. Y es que la Dirección General de Costas ya ha respondido a las ocho alegaciones que se presentaron sobre la demarcación marítimo-terrestre que propone para Benidorm, y sólo ha contemplado dos, presentadas por los hoteles Selomar y Colón, según fuentes de la concejalía de Urbanismo.

Todavía no hay nada definitivo, ya que, según el propio órgano ministerial, el proceso se encuentra en fase de tramitación. De hecho, los interesados pueden presentar nuevas alegaciones.

No obstante, ambos hoteles, que se veían afectados por la línea de dominio público planteada por Costas, de momento, ya se han llevado el gato al agua. El caso más problemático era el del Hotel Selomar. Dicho edificio, situado frente a la playa de Levante y propiedad de la familia del senador del PP Agustín Almodóbar, tenía bloqueada su venta al pasar dicha línea de dominio público por debajo de sus balcones. De cara a cualquier obra de reforma, Costas exigía un retranqueo de todo el bloque, lo cual encarecía el proyecto de las empresas interesadas en adquirir este hotel, cerrado desde hace más de siete años.

El propio Ayuntamiento, mucho antes de verano, se reunió con la Dirección Territorial de Costas con el fin de encontrar una solución a este problema, que bloqueaba el uso de uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Sin embargo, el objetivo del Consistorio iba más allá del Selomar. El área de Urbanismo intentaba que el Ministerio tuviera en cuenta que el Plan General de Ordenación Urbana de Benidorm y el deslinde del año 1964 marcaban dicha línea junto a la zona del paseo que está pegada a la arena. De hecho, según el gobierno municipal, todavía están los mojones que así lo señalan. Costas, por contra, dibujaba esta línea por todo el frente fachada de los edificios de la zona, pasando por debajo de los volados del Selomar.

Lo que quería el Consistorio benidormense es que esta demarcación no afectara a ninguno de los edificios situados en primera línea, tanto de la avenida de Madrid como de la de Alcoy. La cuestión es que el órgano ministerial sólo ha aceptado las alegaciones de los propietarios de estos dos hoteles, tal y como han indicado desde el área municipal de Urbanismo. De las ocho alegaciones, una era del Consistorio y el resto de particulares.

En la del Selomar sólo se desplaza la línea que había fijado Costas una serie de metros por la zona en la que se encuentra dicho hotel, desde la Plaza del Torrejó a la avenida Martínez Alejos, desafectando, por tanto, sólo tres edificios. Según fuentes municipales, el Ministerio ha esgrimido que «no es necesario» contemplar esta zona como dominio público». En la del Hotel Colón, en Poniente, el movimiento de la línea sólo se lleva a cabo para que deje de perjudicar a este negocio, según las mismas fuentes municipales.

Fuentes de la familia propietaria del Selomar se mostraban ayer encantadas con esta buena nueva para sus intereses. «Los futuros propietarios sólo tendrán que quitar un pequeño espacio de balconada, y con eso ya lo tendrían todo en regla», manifestaban a este diario, además de precisar que la operación de venta, tras esta noticia, está casi cerrada y a final de año ya podría ser un hecho. Ahora, según subrayaron, sólo tiene que resolver su familia unos problemas administrativos al haber fallecido uno de sus miembros y existir una serie de trámites relacionados con la herencia. No obstante, dejaron claro que el principal escollo que tenían ya está solucionado.