La tensión que vive la plantilla de la Policía Local de Callosa d'En Sarrià con el alcalde de la localidad, Batiste Saval, continúa. Después de que el sindicato SPPL presentara este verano una denuncia ante la Fiscalía en la que acusaba a Saval de «presuntos delitos de acoso laboral y prevaricación y cualquier otro delito que se derive de la instrucción de las diligencias contra la plantilla de policías locales», el alcalde ha movido ficha y ha comenzado a bajar el sueldo a algunos agentes. En concreto, lo ha hecho a dos delegados del citado sindicato y un afiliado al mismo.
La medida empezó a tramarse hace meses, cuando muchos agentes manifestaron su disconformidad con las asignaciones individuales que Saval imponía por decreto o avaladas por su Junta de Gobierno, entre ellas, órdenes de servicios extraordinarios en días de descanso. En ese momento, el alcalde ordenó un cambio en la denominación de un concepto consolidado en sus nóminas, una «gratificación» aprobada hace una década para compensar el bajo sueldo de los agentes (que no llegaba a los 1.000 euros). De un mes a otro, la «gratificación» pasó a llamarse «complemento de productividad», un extra que compete conceder o quitar al alcalde.
Los agentes, sin embargo, no se dieron cuenta del ardid al seguir cobrando durante meses el mismo montante. Pasado ese tiempo, también se cambió la cantidad a cobrar y, al menos tres agentes, han visto cómo sus nóminas se han quedado en poco más de 1.000 euros (incluyendo complementos de nocturnidad y peligrosidad) al serles eliminada la «gratificación» de 114 euros.
A dos de los agentes la bajada les fue notificada argumentándola en haber dirigido el tráfico una noche a las 22 horas utilizando el silbato y ocasionando con ello molestias a un vecino. Según éstos el gobierno local ha decido así bajarles el sueldo y además conceder a un vecino la potestad de decidir sobre si es idóneo o no utilizar el silbato por la Policía Local, aunque sólo los agentes tienen la facultad de decidir su uso, según figura en el Regalmento General de Circulación.
La tercera agente que se ha quedado sin la gratificación no fue avisada. Se da la circunstancia de que es la delegada sindical que denunció por registro en el Ayuntamiento de Callosa d'En Sarrià que allí tesorero, interventor y secretario municipal «llevan ocho años en el cargo sin titulación exigida».
Un agente ha manifestado que presentará una denuncia individualizada por el acoso laboral que dice estar sufriendo «por un alcalde y un equipo de gobierno local que nos ha defraudado».
Paralelamente, su sindicato, el SPPL, ya ha recurrido la medida por la vía administrativa y en breve pasará lo ocurrido al fiscal. Según declaró ayer el vicepresidente provincial del SPPL, Francisco A.González, «el Sindicato Profesional no va a consentir ninguna actitud arbitraria ni caciquil contra ningún colectivo, en este caso contra la policía local, y menos contra ningún afiliado o representante sindical, que es lo que hemos venido observando hasta ahora». Y añadió: «Ya hemos iniciado las acciones judiciales pertinentes y esto será una ampliación a las mismas. Entendemos que deberían centrar su acción de gobierno en regularizar la licencia de apertura del camping del Algar, que al parecer carece de ella, en vez de atacar quienes velan por que se cumpla la legalidad».
Cabe destacar que uno de los agentes afectados acaba de recibir una felicitación por su colaboración con la Unidad del Crimen Organizado de la Policía Judicial de Alicante.
