El sonido de tambores y cascos de los caballos sobre los que llegaron jinetes portando halcones anunció ayer en Benidorm la Entrada Mora y Cristina. El desfile, que un año más fue presenciado por miles de turistas, lo abrió la abanderada Susana Ausías, portando con ella, en su carroza con forma de elefante, el estandarte de la Asociación de Moros y Cristianos de Benidorm. Junto a ella, la Colla de Xirimiters de la Marina.

Tras la Abanderada tomaron presencia las filaes del bando Moro, con Nazaríes entrando con una escuadra especial de mujeres dirigida por MªCarmen Moreno. A continuación, la escuadra Especial de Hombres con el cabo Ernesto Verdú, seguido de la Oficial y cerrando la filá, el futuro de la fiesta, una carroza de niños con el fester más veterano de los Moros y Cristianos de Benidorm, José Villa.

La filá Tagarinos tomó el relevo. Abrió el paso la escuadra especial de hombres, con el cabo Alfonso Laguna, seguido por otra de mujeres dirigida por MªJosé Sánchez, ambos al paso de la marcha «Suana» compuesta para la reina de 2009.

La filá del Rey, Tuareg, se hizo esperar. A gran distancia del resto de huestes, llegó su estandarte a caballo, como el Embajador Moro, Manuel Palazón. Tras él, la escuadra de mujeres y la impresionante escuadra de Bosquimanos de Villena -que logró la aclamación del público- seguidos del joven jinete Arturo Leal.

El director general de Turismo, Sebastián Fernández, marcó después el paso de la escuadra especial del Rey Moro. A continuación, invitados para hacer más grande la fiesta, la escuadra Tuareg de Mojacar. Un ballet acompañó la carrazoza del Rey Moro, Luis García y su favorita, Salvadora Avio, inspirada en un palacio árabe. Finalmente, la escuadra de la Reina y Damas Mayores de las Fiestas patronales de Benidorm y la oficial de la filá cerró el boato del monarca sarraceno.

Impresionante fue el arranque de la entrada Cristiana. El sonido de las gaitas de los Astures llenó las calles de Benidorm. Tras su estandarte, un tapiz de la cruz de Don Pelayo y un ballet, tras los cuales avanzaron las escuadras.

La fila Cavallers de la Baronía, con su estandarte en la carroza infantil, llegó después, con dos escuadras especiales, una de hombres y otra de mujeres.

Finalmente, abanzaron cerrando el desfile los Cruzados, filà del Rey Cristiano 2014, Francisco Martínez Losada, quien llegó arropado por un amplio boato.

Éste lo inició su estandarte con el Embajador Cristiano, Manuel Palazón Martí, y un grupo de percusión. El despliegue llegaría después con maquinaria de guerra: un ariete con el emblema cristiano, varios carros de forja y hornos para las armas, etc.

Precediendo otros tantos carros con telas y más armamento, la escuadra institucional, dirigida por el cabo Jesús Carrobles. Finalmente, un cabo batidor y una escuadra de mujeres escoltaron la llegada de la carroza cristiana.

Inspirada en una fortaleza custodiada por pétreos caballeros, se presentó el Rey Cristiano, Francisco Martínez Losada, junto a sus damas, María Cabo y Nerea Martínez.

Cerró el desfile la escuadra oficial de la filá.