El verano ha terminado, aunque las playas sigan abarrotadas y es el momento de hacer balance. La Asociación Independiente de Comerciantes de Benidorm (Aico) ofreció ayer los datos estadísticos de las ventas del periodo estival. Unos datos que, según explicó el presidente de la agrupación, Rafael Gasent, «no son nada buenos».
Gasent indicó que este año el volumen de negocio ha caído un 30% respecto al mismo periodo de 2013. Pero, también, señaló que la del pasado año se trata de una cifra «relativamente significativa y a la que hay que hacer poco caso porque se está comparando con un año que fue increíble, el mejor de los últimos cinco», dijo el empresario. Asimismo, añadió que con los datos de esta temporada, se ha retrocedido a los niveles de los años 2011 y 2012.
Gasent comentó que se trata de una bajada «global», y por lo tanto muy irregular, porque hay comercios en los que sí que han aumentado sus ventas.
Los souvenirs bajan en picado
Además, detalló la situación de los comercios por zonas. «La más castigada es la del Rincón de Loix, mientras que la del centro es la mejor parada», dijo. En cuanto al tipo de negocio, los comercios de souvenirs son los que más han sufrido la caída de las ventas, mientras que las tiendas de textil se mantienen o han aumentado sus negocios.
El presidente de Aico comentó que en un principio preveían que iba a ser un buen año, sobre todo por lo bien que había ido en Semana Santa, siempre un indicador de referencia de lo que puede ocurrir en verano. Sin embargo, «junio fue muy bueno, la primera quincena de julio fue una catástrofe, en la segunda se recuperó y en agosto se ha mantenido», explicó Gasent.
