Pese a la aparente recuperación económica que atraviesa uno de los principales sectores productivos de la comarca, como es el turismo, la demanda de ayuda social en Benidorm apenas se ha visto mermada por esta circunstancia, sino todo lo contrario. Así se refleja en los datos oficiales proporcionados por el comité local de Cruz Roja, que en lo que llevamos de 2014 ha visto dispararse enormemente los casos de personas necesitadas que piden su auxilio para paliar la difícil situación que atraviesan.
El caso más llamativo es el brutal incremento de casos que se han atendido desde esta ONG para apoyar a personas sin hogar en la ciudad, y que desde enero a agosto de este 2014 se ha multiplicado por siete con respecto al número de atenciones prestadas en el mismo periodo del año anterior. Entonces, hasta esa fecha, el área de Intervención Social de Cruz Roja en Benidorm proporcionó comida en conserva, sacos de dormir o artículos básicos de higiene personal a trece personas, una cifra que se ha disparado este año hasta los 88 casos, según explicó la trabajadora social de la agrupación, Yolanda Navarro. Y el dato podría acabar alcanzando registros aún más elevados, puesto que en las últimas semanas, como ya ocurrió en 2013, ha habido un nuevo repunte, debido a que, pasado el verano, «mucha gente viene a Benidorm pensando que aquí puede tener más facilidades para encontrar trabajo de cara al invierno y acaba sin nada», agregó Navarro.
A la creencia de que en Benidorm podrán tener más facilidades para reconducir su situación, otro de los factores que influye en la presencia cada vez más de gente sin techo a la ciudad es la climatología. Según explican los responsables del programa, las noches en Benidorm son más suaves en invierno que en muchas otras zonas de España y, en la mayoría de los casos, ante la falta de un albergue social, estas personas recurren a la playa, los parques o asentamientos del extrarradio para pernoctar.
La agrupación local de Cruz Roja puso en marcha este servicio por primera vez el pasado año, desarrollado conjuntamente por trabajadores y voluntarios. Con él, además de atender las necesidades más acuciantes de los «sin techo», también se realiza un seguimiento que incluye la prestación de apoyo psicológico y la ayuda en la búsqueda de un empleo, en aquellos casos que no están calificados como «crónicos». Y ahora parecen ser la gran mayoría.
De hecho, estas fuentes indicaron que más de la mitad de las personas sin hogar atendidas en lo que va de año se inscriben en el grupo de los llamados «nuevos pobres», es decir, personas cuya vida era completamente normal hasta que estalló la crisis y que, tras ella, han acabado por perder el empleo, la vivienda y viéndose de la noche a la mañana en la calle.
Desde Cruz Roja también han realizado un llamamiento al Consistorio para que agilice la dotación de duchas y del servicio de lavadora pública prevista en la zona de Mercasa, para la que se ha reservado una partida en el presupuesto de 2014 a petición del Consejo Vecinal. Según indicaron, además de por cuestiones de salud, mantener la higiene es uno de los aspectos básicos para estas personas, tanto a nivel psicológico como para poder acudir a buscar empleo o a una entrevista de trabajo, de ahí que crean «muy necesario» que el Consistorio proporcione este servicio como un apartado más dentro de sus ayudas sociales.ayudas sociales
Otros programas sociales
Junto con la ayuda a personas sin hogar, otros programas que también han registrado un notable incremento en Cruz Roja Benidorm son los relacionados con la alimentación básica de adultos y bebés. alimentación básica De enero a agosto, el reparto de comida ha pasado de 156 a 281 familias, mientras que la demanda de potitos, lecho o pañales para a niños de corta edad ha crecido de los 30 casos del 2013 a más de 70 en el actual. Desde la ONG indicaron que sigue siendo muy necesaria la donación de productos de todo tipo para poder llegar a toda la demanda.
