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Juan Carlos Hernández

«Hay que educar a las personas para que hagan caso de la bandera roja»

Los servicios de socorrismo han salvado la vida a tres personas en lo que va de año

«Hay que educar a las personas para que hagan caso de la bandera roja»

Juan Carlos Hernández es coordinador del servicio de socorrismo y salvamento de las playas de Benidorm. Tiene a su cargo a 49 personas para que los miles de bañistas que se sumergen en la costa de la ciudad estén seguros y a salvo. Desde las 10 de la mañana hasta las 20 horas, vigilan continuamente las playas de Levante, Poniente, Mal Pas y Ti Ximo.

¿Cómo está yendo el verano en las playas de Benidorm?

Podríamos decir que está siendo una temporada normal. Hemos realizado 25 rescates de víctimas sin incidencias. Siete bañistas han sufrido una parada cardíaca, de los cuales salvamos la vida a tres de ellos. Atendemos a los bañistas en el momento, es como si estuvieran en las Urgencias de un hospital.

¿Cómo es el trabajo de un socorrista en esta ciudad?

Además de la labor que todo el mundo conoce, vigilando a pie y desde las sillas, realizamos un trabajo muy preventivo. Tratamos de que todos los niños estén acompañados de sus padres o la persona que esté a su cargo. Además, tenemos un margen de seguridad por encima del estándar.

¿Qué singularidades tienen?

Son playas cardioprotegidas, tenemos seis puntos preparados con desfibriladores. Aseguramos la asistencia a la víctima en menos de cuatro minutos. Además, los hamaqueros, que trabajan para la misma concesionaria R.A. Benidorm, también complementan este trabajo, ya que 15 de ellos están formados para utilizar los desfibriladores. Es importante porque llegan antes que los socorristas.

¿Cómo actúan cuando el estado del mar está revuelto?

Este fin de semana, por ejemplo, tuvimos que cerrar al baño una parte de la playa, y ni siquiera dejábamos que se mojaran los pies. Hay algunos bañistas que se enfadan, pero la seguridad del equipo de Salvamento está por encima de todo. Son personas y también pueden cometer errores. Si ponemos en riesgo la vida de los socorristas, que son los que tienen que ponerles a salvo, no tiene sentido.

También hubo una sanción de 1.000 euros a un bañista por nadar con bandera roja. ¿Hacen poco caso de sus indicaciones?

Que va. La gente, por lo general, obedece muy bien. Ahora hacen mucho más caso a las normas que cuando trabajaba en el 2001. Acuden más a los socorristas para informarse, y respetan más su labor.

¿Qué lugar es el menos seguro de las playas de Benidorm?

La zona más peligrosa está en la Cala, que es donde se genera más corrientes. Cuando el mar cambia y tenemos que cerrar zonas como las plataformas o los puntos accesibles, reforzamos la zona en cuestión con estos socorristas para que estén a pie de playa.

¿Se puede decir que las playas de Benidorm son seguras?

Benidorm es una de las playas más seguras cuando están las banderas verde y amarilla, siempre que se atiendan nuestras indicaciones. Aún hay que educar a las personas para que hagan caso de la bandera roja. Algunos turistas que vienen de fuera y han estado en otras playas con olas más grandes, las comparan con Benidorm y se creen que están a salvo. Pero en esta ciudad el peligro viene de las corrientes y eso no se percibe viéndolo desde fuera. Muchos de ellos cuando salen del agua nos dan la razón.

¿Cómo es el turista de Benidorm?

Las personas que vienen aquí quieren descansar y refrescarse. Los propios bañistas crean como una línea en el mar. Son pocos los que se sumergen más allá de donde hacen pie. Los que nadan hasta las boyas, lo hacen porque saben que tienen las condiciones físicas, y si ven que no pueden más, ellos mismos se vuelven a la orilla antes de que les pase nada.

¿Cuáles son las incidencias más comunes?

Las incidencias graves se dan en las personas mayores con problemas del corazón. La hora más común es pasadas las cinco de la tarde, con los cortes de digestión. También es habitual la bajada de tensión en los señores y señoras mayores, para los que el sol es uno de los grandes enemigos. En junio la temperatura del mar estaba en torno a los 24 grados, entonces la combinación del agua fría y los problemas del corazón era un peligro añadido.

¿Qué recomendaciones le haría a los bañistas?

Tienen que asegurarse de que ondea la bandera verde. Los niños tienen que permanecer cerca de las personas mayores que estén a su cargo, además de situarse cerca de los puestos de socorro. Es aconsejable que los bañistas pregunten al equipo de salvamento sobre los riesgos del mar. Nadar en zonas seguras, aquéllas donde hagan pie. Además, hacerlo en paralelo a la orilla, cerca de ésta, y si puede ser acompañado, mejor. Y aunque parezca una tontería, respetar los horarios de digestión y no tomar el sol cuando más fuerte pega.

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