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Recorrido por los sabores de La Vila Joiosa

La localidad da a conocer sus productos típicos entre los visitantes mediante una ruta gastronómica

Recorrido por los sabores de La Vila Joiosa

Con sabor vilero. Por primera vez, los turistas que visitan La Vila Joiosa tienen la posibilidad de conocer más la ciudad a través de un sabroso recorrido en el que degustan los productos más típicos de la localidad. La ruta, puesta en marcha por la empresa Esatur, se une a otras siete propuestas que van desde una cita romántica a la orilla del mar a una ruta en bicicleta por las tres fábricas de chocolate. En definitiva, nuevas fórmulas para captar turistas a través de experiencias más allá de la promoción tradicional.

Ocho turistas, de Francia, Suiza y Bélgica, se trasladaron ayer, a las 11 de la mañana, al chalé Centella, situado en la calle Colón con el propósito de participar en «La Vila gourmet walking tour». Guiados por Nacho Girones, conocieron un poco de la historia del mítico edificio, que originariamente era propiedad de la familia Lloret Llinares. Tras la explicación el grupo se dirigió al primer destino, la plaza del mercado.

El guía, bandeja en mano, les presentó los productos de la carnicería de Ramón Carrión. Aunque en primer momento los participantes se mostraron un poco tímidos, finalmente cayeron en la tentación y degustaron sobrasada, queso, butifarra, salchichón y salchicha de pascua. Este último embutido fue el que más gustó a los turistas, quienes destacaron su sabor y la textura del mismo. A continuación, visitaron el colorido puesto de frutas y verduras de Mari Carmen Riuaes, en el que degustaron sandía, melón y uva, entre otros alimentos. A todos les llamó la atención una pieza de paraguayo, ya que era la primera vez que lo veían y probaban. Y además, manifestaron que les había encantado el sabor dulce de los higos.

Seguidamente, el guía los dirigió a una tienda delicatassen, especializada en vinos y productos gourmet. Tras un brindis con un rosado espumoso acompañado de dos tipos de quesos ecológicos, los turistas mostraron su satisfacción, sobre todo los franceses, en cuyo grupo había una mujer que en su país es aficionada a la cata de esta bebida alcohólica. El siguiente destino fue La tendenta del salat, en la que la propietaria les ofreció melva, mojama, atún seco, entre otros manjares. A la salida del establecimiento, los turistas comentaron: «Está salado pero muy bueno. Es una delicia». Y tras la pizca de sal, llegó el momento para que disfrutaran los paladares más golosos. En esta ocasión visitaron una panadería en la que probaron la tradicional coca de mollitas, a base de harina aceite y sal, y además tuvieron el placer de degustar una porción de una sabrosa magdalena gigante, ambos productos elaborados artesanalmente en el propio establecimiento. Y tratándose de La Vila, no podía faltar con la cita del producto más representativo de la localidad, el chocolate. Y como punto final, a las más de 2 horas de esta deliciosa ruta, lo puso un refrescante vasito de horchata. En la heladería los participantes, conocieron el proceso de elaboración de esta bebida.

Feron, procedente de Francia, afirmó que vive en La Vila hace 3 meses y que le encanta «la tranquilidad, la zona del casco antiguo y la gente». Así explicó que había realizado la ruta para conocer mejor el municipio. Patrice, de Suiza, destacó el clima y las playas y aseguró que la gastrorruta le parece «estupenda».

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