El Ayuntamiento de Benidorm llevará al próximo pleno municipal la actualización de la Modificación Puntual del Plan General Nº1, denominada Incentivación Hotelera, con la que permitirá la renovación de la estructura de cerca de 70 negocios hoteleros de la ciudad de 3, 4 y 5 estrellas. A través de este proyecto, redactado por el area de planeamiento de Urbanismo, se definirá el aumento de la edificabilidad de los hoteles, dependiendo de su categoría y de la zona donde se ubican. Igualmente, se fijará la compensación para el municipio que los establecimientos deben aportar, fundamental con parcelas para dotaciones públicas.

El objetivo principal de esta iniciativa es, por un lado, mejorar la planta hotelera de la ciudad y, por otro, acabar con el antiguo «premio hotelero», que consistía en una serie de bonificaciones que beneficiaban la construcción de hoteles de cuatro y cinco estrellas. Como contrapartida, las empresas tenían que dar alguna compensación -en suelo o económica-. A principios de la década del 2000 se acogieron a este plan más de una quincena de establecimientos y ninguno compensó al municipio.

Medidas compensatorias

La modificación del PGOU que ahora se quiere aprobar trata de clarificar todas las reglas del juego. De alguna manera, se inspira en la aprobación del Plan de Reforma Interior (PRI) para la construcción del Hotel Casino Mediterráneo que se realizó en febrero. Entoces, se permitió incrementar el tamaño de las habitaciones, pero incorporando medidas compensatorias que mantuvieran la proporción y calidad de las dotaciones públicas. Los propietarios de este establecimiento han cedido parte de su parcela al municipio como suelo dotacional y además han pagado alrededor de los 300.000 euros.

Lo que permitirá ahora Urbanismo será que los hoteles de 3, 4 y 5 estrellas de edificación abierta de Benidorm puedan aumentar el aprovechamiento urbanístico de su parcela, ateniéndose a criterios como el lugar en el que están ubicados o la categoría que tienen. «Los hoteles de 3 estrellas podrán incrementar 5 metros cuadrados las habitaciones sobre el estándar mínimo que regula la Conselleria de Turismo. A los hoteles de cuatro estrellas les permitiremos 10 metros cuadrados de más y a los de 5, 15 metros», argumentó el concejal de Urbanismo, Vicente Juan Ivorra.

En el proyecto se divide Benidorm en nueve zonas y en cada una se establece un coeficiente de canje. «No es lo mismo el valor del suelo en la zona de la Playa de Levante que en la Colonia de Madrid», añade Vicente Juan Ivorra. Según los metros que se incrementen en un hotel, se aplicará este coeficiente de homogeneización para saber con cuánto tiene que compensar al municipio. El objetivo, según Urbanismo, es que ceda dos metros lineales de su frente fachada para uso dotacional público. De esta manera, el Consistorio podría conseguir aceras más amplias y aumentar el arbolado en algunas vías. Puede darse el caso de que esta cesión no sea suficiente en relación al número de metros que ha aumentado su edificabilidad.

Plan antirriadas

Si se produce esa tesitura el Ayuntamiento ofrece dos opciones: O bien una compensación económica para que el Consistorio pueda comprar suelo dotacional o que el propio empresario adquiera terrenos de este tipo en una serie de bolsas dotacionales que el área de Urbanismo ha definido en la zona de discotecas, en Serra Gelada y sobre una serie de balsas de laminación por la zona industrial, que beneficiaría tenerlas de cara a un futuro plan antirriadas. Después, los establecimientos las cederían a la localidad.

«Lo que busca el Ayuntamiento es una compensación y, sobre todo, que este aumento de la edificabilidad mantenga el equilibrio con el suelo dotacional. Incluso, para atender al Plan de Acción para la Energía Sostenible, ya que los árboles permiten reducir la emisión de CO2 a la atmósfera», reseñó el responsable de Urbanismo en Benidorm.