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Altea

Aprender entre alfiles

El colegio de L'Olla de Altea introducirá el curso que viene el ajedrez como contenido de diferentes materias

Lalo y Paul, dos alumnos de segundo de Primaria del colegio de L'Olla de Altea, no tienen muy claro si les gusta más el fútbol o el ajedrez. Aunque los grandes ajedrecistas mundiales no tienen pinta de superhéroe, como puede ocurrir con Cristiano Ronaldo, ambos llegan a decir que, por lo menos ayer, ponían en el primer escalafón de sus aficiones este juego. «Nos ayuda a concentrarnos y a relajarnos un poco», afirman ambos sin perder de vista los movimientos del compañero.

Carlos Martínez Piqueras, coordinador de Psicología de la Federación de Ajedrez de la Comunidad Valenciana, asegura que existen estudios que demuestran que el ajedrez ayuda más a los niños a desarrollar la inteligencia emocional que deportes como el fútbol o el baloncesto. «A través de este juego se relacionan con mucha gente. Y suelen comentar las jugadas después de cada partida», subraya.

Martínez Piqueras explicó ayer a los padres de los alumnos de este centro educativo alteano las ventajas de que se vaya a introducir el curso que viene, de manera transversal, el ajedrez en diferentes materias que cursarán sus hijos. Según este especialista, este juego milenario ayuda a desarrollar en el niño habilidades cognitivas tan importantes como la capacidad de concentración, la toma de decisiones, la creatividad... «En muchos colegios de Alemania se ha implementado en los currículos escolares y la experiencia ha sido muy positiva», destaca este miembro de la federación de ajedrecistas. Y es que, a través de este juego, según Chelo González, una de las profesoras de este centro, los pequeños pueden aprender matemáticas, idiomas, educación física o conocimiento del medio.

Por ejemplo, han ideado una tarea con fichas de ajedrez que consiste en ir construyendo frases con palabras que están ubicadas en cada casilla. O a los más pequeños les propondrán actividades de motricidad sobre un tablero gigante, donde realizan movimientos como si fueran fichas de verdad.

«También se les puede enseñar la historia del ajedrez y explicarles dónde se ubican los países en los que se comenzó a desarrollar», apunta esta docente.

Instrucción a los docentes

Durante este curso, los profesores han sido instruidos en este juego a través de miembros de esta federación de ajedrez de la Comunidad.

«La coordinadora de formación del centro no tenía ni idea de jugar, y ahora está encantada», afirma Luis López, director del colegio.

Talleres de introducción

Ayer, con motivo del fin del curso y de adentrar un poco a los pequeños en los nuevos conocimientos que se les impartirán a partir de septiembre, se llevaron a cabo talleres con todos ellos. Desde construcción de piezas a través de arcilla, actividades deportivas en los que los niños adoptaban el rol de ficha, partidas de ajedrez o juegos introductorios algo más básicos para que vayan desarrollando habilidades como la capacidad de elaborar una estrategia. «A mí a veces me sale el Pastor ese...», advierte uno de los alumnos, al que su padre ya le había «soplado» un par de trucos, y que se refería en este caso a una de las jugadas del ajedrez. Luis López señala que este juego es una de las fórmulas que ha querido incluir en un colegio en el que siempre están intentado aportar nuevas estrategias de aprendizaje. «Aquí no valoramos tanto la cantidad de conocimientos que adquiere el niño como las capacidades que pueda llegar a desarrollar».

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