El recorte de unidades en la escuela pública ejecutado por la Conselleria de Educación para el próximo curso 2014-15 acabará teniendo un efecto menos perjudicial de lo esperado en los colegios de Benidorm. Así, al menos, se desprende de los datos oficiales de matriculación registrados en los trece centros públicos y uno concertado de la ciudad, que a fecha de hoy disponen aún de 59 plazas vacantes para poder dar cabida a nuevos alumnos de 3 años. Sólo tres centros, entre ellos el religioso Nuestra Señora de los Dolores, se verán obligados a derivar escolares a otros colegios al haber registrado un exceso de demanda, mientras que en otros siete hay entre doce y 21 pupitres libres de cara al inicio del próximo curso.
Estos datos harán, por tanto, que Educación no tenga que habilitar, de momento, otra aula adicional, a no ser que en septiembre se produzca una avalancha de solicitudes, algo, por otro lado, bastante habitual en Benidorm debido a la movilidad de su población y a la continua llegada de nuevos residentes en busca de un puesto de trabajo en el sector turístico.
La ciudad ha cerrado la primera fase de matriculación, con un total de 505 solicitudes frente a las 564 plazas que ofertaba para el próximo curso, de ellas 512 públicas, donde se aglutinan todas las vacantes aún por cubrir. Los dos únicos centros públicos que han superado con creces su capacidad son el CEIP Bautista Lledó, uno de los pocos de la provincia que imparte clases plurilingües y que ha recibido 73 instancias para 25 plazas escolares; y el CEIP La Cala, donde también se desarrolla un programa de la UE de intercambio de experiencias con otros centros de Europa y en el que se han registrado 33 solicitudes frente a las 26 plazas disponibles. Como estos, el concertado Nuestra Señora de los Dolores también cuenta con una demanda por encima de su oferta, en concreto, 66 peticiones para 52 pupitres. Por tanto, estos tres centros tendrán que desviar a otros colegios a un total de 69 alumnos, cuyas familias los habían escogido como primera opción y ahora tendrán que matricularlos en las escuelas que seleccionaron como alternativas.
Entre los datos más llamativos, al margen del elevado número de plazas aún vacantes, destaca el hecho de que la oferta pública y concertada sólo absorberá un 81,3% del total de niños empadronados en Benidorm: 505 frente a los 621 en edad de iniciar la escolarización en el segundo ciclo de Infantil, mientras que el pasado curso el porcentaje fue del 86% en la primera fase de matrícula y alcanzó el 91% en el mes de septiembre.
También llama la atención que la implantación de la jornada continua en dos colegios de la ciudad, el Aitana y el Leonor Canalejas, no ha servido como revulsivo para animar la demanda. De hecho, los dos centros han obtenido 10 y 34 solicitudes respectivamente, lo que representa una pérdida de uno y siete alumnos con respecto a la matrícula que tuvieron el curso anterior, según los datos facilitados por la Concejalía de Educación, que dirige el socialista Rubén Martínez.
