Los festeros de senija parodiaron el martes en la cabalgata humorística el acuerdo del pleno de Benissa de buscar con el pueblo vecino «un lugar digno» al que trasladar la Roca de la Salve. En esta gran piedra, que ahora está en el patio de la escuela de Senija, rezaban los emigrantes de estos dos pueblos que se marchaban a ganar algo de dinero en los cultivos de arroz (se les conocía como «riberers»). Los festeros, vestidos de «riberers», pasearon la roca por el pueblo. Llevaban un cartel con la leyenda «la roca ya está en un lugar digno». Las disputas entre pueblos vecinos dan mucho juego en las fiestas.