Monumental. Así podría definirse el atasco que provocó ayer el corte de un tramo de la variante de la Nacional 332 a su paso por Benidorm en esta carretera y también en las principales avenidas de acceso o salida al casco urbano desde Levante. El cierre de la circulación durante mucho más tiempo del que inicialmente se había anunciado, y la falta de planificación municipal para distribuir el tráfico por otras vías alternativas, generaron retenciones desde primera hora de la mañana hasta pasadas las ocho de la tarde, cuando la N-332 volvió a reabrirse al tráfico rodado.

Y el caos podría volver a repetirse durante la jornada de hoy. Aunque inicialmente se había previsto que el cierre de la variante sólo se prolongaría entre las nueve y las once de la mañana de ayer, fuentes de la Policía Local alertaron anoche de que, casi con toda seguridad, habrá nuevos cortes durante el día de hoy, por lo que aconsejaron a los conductores que transitan habitualmente por esta zona, tomar otros itinerarios para sortear los atascos.

El cierre de la N-332, motivado por las obras que ejecuta el Ministerio de Fomento para duplicar los carriles de la variante, se produjo en el tramo más próximo a la salida hacia la zona de Levante, en las inmediaciones del peaje de la AP-7, para los vehículos que circulaban en dirección a Valencia. Ello obligó a desviar a todo el tráfico rodado hacia las avenidas de la Comunidad Europea y de la Comunidad Valenciana, para poder incorporarse de nuevo a esta carretera en las inmediaciones del término de l'Alfàs.

La existencia de varias rotondas y cruces regulados por semáforos hizo que los viales antes citados fueran incapaces de absorber todo el volumen de vehículos desviado desde la N-332, principalmente en lo que respecta a la avenida de la Comunidad Valenciana, en la que sólo existe un carril en cada dirección. De hecho, en algunos momentos del día, la cola de coches en esta avenida se prolongó desde el conocido como cruce de «l'Estanquet» hasta la rotonda que une las avenidas de Europa, Comunidad Europea y Alfonso Puchades, que también se vieron afectadas por la retención, según fuentes de la Policía Local.

Dos de los momentos más complicados de la jornada fueron los horarios de entrada y salida a los colegios del recinto educativo del Salto del Agua, cuando además de los vehículos de particulares también confluyeron numerosos autobuses escolares.

La Policía Local distribuyó a un total de seis agentes en cada turno para intentar agilizar la circulación en los principales cruces afectados por el desvío, ante la imposibilidad de destinar a más efectivos al margen de los que disponía en el servicio ordinario. Como ya contó ayer este diario, fuentes del área de Movilidad no habían tenido conocimiento del corte hasta el mismo miércoles, debido a que el aviso de la contrata, al parecer, llegó a un técnico que no la remitió a ningún otro departamento. Por eso, desde esta Concejalía lamentaron no haber podido prever un dispositivo especial de policías ni de señalización e información para intentar minimizar el colapso.

Por su parte, el grupo municipal del PP criticó la falta de planificación del gobierno local y dijo que lo ocurrido ayer «es el mejor ejemplo». Los populares reclamaron la creación de una mesa de coordinación técnica donde poner en común todos los aspectos de cada departamento que afecten a la ciudad.