Al Ayuntamiento de Benidorm se le ha puesto de cara la aprobación de los presupuestos municipales de 2014, tras el cierre de las cuentas del pasado ejercicio. Y es que, según la liquidación de 2013, el Consistorio ha cerrado con más de 9,5 millones de euros de superávit y con 20,5 millones de remanente de Tesorería. Estas cifras fueron presentadas ayer en rueda de prensa por el alcalde, Agustín Navarro, y la concejal de Hacienda, Natalia Guijarro. La edil apuntó que, de dicho remanente, extraerán en septiembre los seis millones necesarios para pagar la expropiación forzosa del «Moralet» al constructor alicantino Enrique Ortiz, cumpliendo así con el auto dictado por el TSJ-CV.

Hasta la fecha, el Ayuntamiento aseguraba que no sabía de dónde sacaría la partida para hacer frente a ese montante, por lo que dicho justiprecio tenía en jaque los presupuestos de 2014. «Si no contáramos con este remanente, no nos hubiera quedado otra que sacar este dinero de las únicas partidas que hasta la fecha no hemos ajustado, que son las de Educación, Bienestar Social y Fomento del Empleo. Ahora, podrían incluso incrementarse», subrayó Guijarro durante su intervención. Así, la edil de Hacienda explicó que ahora el gobierno local podrá elaborar los presupuestos, que prevé llevar al próximo pleno ordinario de este mismo mes.

Otro de los aspectos que quisieron resaltar es el de haber logrado un superávit, «algo que no se ha obtenido en este Consistorio en los últimos diez años», remarcó la concejal, además de señalar que estos 9,5 millones representan un 10,5 por ciento del presupuesto total.

El cierre de ejercicio arroja un presupuesto definitivo de ingresos de 101,6 millones, 92,01 millones de gastos y más de 80,5 millones en pagos realizados. Asimismo, la concejal quiso destacar que «todas las facturas que se han emitido al Ayuntamiento antes de 2014 ya están aprobadas», por lo que «no hay facturas en el cajón». Es decir, se ha acabado de cara a 2014 con las operaciones pendientes de aprobar en el presupuesto (las denominadas opas).

El único epígrafe del plan de ajuste que todavía no cumple el Ayuntamiento es el de la sostenibilidad financiera. Actualmente, debe a los bancos 117 millones, aunque con el remanente conseguido, una vez abonada la partida de El Moralet, pretende destinar el resto -14 millones-, a reducir la deuda con las entidades financieras. El Consistorio estudia también realizar esta operación en septiembre y con ella conseguiría pasar de un 120,77% de porcentaje de endeudamiento a un 110%, que es el que marca como máximo el plan de ajuste.

«Con la reducción de esta deuda, el Ayuntamiento de Benidorm cumpliría un objetivo que en un principio se preveía que se alcanzaría en 2017», dijo el alcalde, Agustín Navarro.

La titular de Hacienda espera que algunos miembros de la oposición dejen ya a un lado «la cantinela del despilfarro» que han atribuido en más de una ocasión a la gestión del ejecutivo municipal. De hecho, el alcalde consideró que no estaría mal que «la oposición pida disculpas porque estos números son incontestables».

El portavoz del PP en el Consistorio, Antonio Pérez, señaló que estos datos siempre son una «buena noticia», pero también precisó que «habría que reflexionar sobre la subida de impuestos que ha realizado el Ayuntamiento últimamente y el gran bajón en las inversiones, además del amplio recorte de funcionarios. Además, todo esto viene motivado por el plan de ajuste impuesto por el Gobierno central que el Consistorio tenía que cumplir», indicó el concejal popular.