Un urbanismo a la carta. El Ayuntamiento de Benidorm permitirá a hoteles de tres y dos estrellas del centro urbano exceder la edificabilidad de sus parcelas en proyectos de reforma que puedan llevar a cabo en un futuro inmediato. Así lo anunció ayer el concejal de Urbanismo, Vicente Juan Ivorra, que señaló que su departamento está estudiando la posibilidad de hacer extensible la fórmula conocida como «premio hotelero» a este tipo de establecimientos, con el fin de incentivar la renovación de la planta más obsoleta del municipio. A la medida podrían acogerse cerca de medio centenar de hoteles. Y la cosa no quedará ahí. Porque el planteamiento de Urbanismo pasa también por que este favor pueda utilizarse también en el caso de edificios de uso residencial construidos en los años 60 y 70 en zonas de ensanche como Poniente y Levante, a los que se permitirá la construcción de un nuevo inmueble con más altura, a cambio de la cesión de suelo o de una indemnización económica como va a hacer, por ejemplo, la empresa del casino.

El «premio hotelero» es un conjunto de bonificaciones urbanísticas que el gobierno popular de Vicente Pérez Devesa introdujo en el año 2001 a través de una modificación puntual del Plan General, con el visto bueno de la Conselleria de Obras Públicas de una Generalitat gobernada entonces por Eduardo Zaplana. El objetivo era beneficiar la construcción de hoteles de cuatro y cinco estrellas en la ciudad. La medida contemplaba la posibilidad de construir establecimientos de nueva planta aumentando el aprovechamiento del suelo previsto en el Plan General, pero sin que éste computara como un incremento de la edificabilidad. O, dicho de otro modo, pudiendo elevar en algunos casos hasta un 40% el volumen de edificabilidad para construir habitaciones más grandes, salones o áreas de spa, gracias a que no se computaban urbanísticamente hablando espacios comunes como vestíbulos, pasillos, escaleras, almacenes, ascensores, cocinas, terrazas o aparcamientos.

La aprobación de esta medida en el arranque de la década del 2000 provocó todo un «boom» en la industria hotelera de Benidorm, hasta el punto de que se acogieron a la misma más de una quincena de establecimientos, muchos de nueva planta y otros que surgieron de antiguos establecimientos que fueron echados abajo. Ahora bien, una de las condiciones impuestas por la entonces Conselleria de Obras Públicas para autorizar el «premio hotelero» era que las empresas que se acogieran a él realizaran a cambio una serie de compensaciones -en suelo o económicas- al municipio, que nunca hasta ahora se han llevado a cabo.

Ampliar su ámbito de aplicación

Trece años después de la aprobación de esta modificación del PGOU, el área de Urbanismo municipal, gestionada por el CDL de Gema Amor, heredera de muchas de las políticas del fallecido alcalde del PP, ha considerado que «ha llegado el momento de ir un paso más allá de aquella apuesta tan valiente que aprobó Vicente Pérez Devesa en 2001», tal y como afirmó ayer el edil del área, Vicente Juan Ivorra. Y este paso no consiste en otra cosa que en extender el ámbito de aplicación de este «premio» a hoteles de dos y tres estrellas del casco antiguo -hasta ahora sólo se consentía en hoteles de cuatro y cinco en zonas de ensanche- y a edificios de viviendas residenciales, cuando la Generalitat autorizó estos beneficios únicamente para espacios de uso turístico y sólo en Benidorm por las particularidades concretas de la ciudad, mientras que lo denegó en municipios limítrofes como La Vila o l'Alfàs.

El concejal indicó que, para poderse beneficiar de estas medidas, los hoteles o edificios que quieran acogerse al «premio hotelero» deberán ejecutar previamente un Plan de Reforma Interior (PRI) para la concesión de las licencias, dentro del cual deberán regularse las medidas compensatorias, cuya viabilidad se estudiará caso por caso. Es decir, lo mismo que se debió hacer desde un principio, pero nunca se hizo.

En lo que respecta en exclusiva a los hoteles de edificación cerrada del centro y del casco antiguo, Ivorra reconoció que la cesión de suelo al Consistorio es inviable, por lo que las compensaciones se realizarán a través de la aplicación de «parámetros de mejora de eficiencia energética».