Antonio Orozco Martínez, de la filà Mitja Lluna, y Vicente García Serrano, de la filà Cristians de la Muralla, fueron nombrados Reyes Moro y Cristiano de las fiestas de Altea 2014 en un emotivo acto celebrado el pasado viernes por la noche en el Palau Altea. Cerca de medio millar de festeros asistieron al auditorio para presenciar en directo el nombramiento de los cargos de este año, uno de los acontecimientos más importantes del Mig Any alteano. En el acto, también destacó la proclamación de las alféreces mora y cristiana, Lluna Espí Pérez, de Moros de Bernia, y María Cano Lloret, de Cristians d'Altaia. Junto a los reyes y alféreces, también se nombraron a los demás cargos de los bandos moro y cristiano. Así, de la Mitja Lluna se presentaron a la embajadora Anna Falgàs Alvado y el abanderado José Antonio Rueda Corral, mientras que de Cristians de la Muralla presentaron como embajador a Juan Francisco Mulet Martínez, y como abanderado a Juan Vicente Ballester Bañuls. De igual modo, los abanderados moro y cristiano de la Associació serán Delia Fuster Tàrraga, de Tuareg, y José Martínez López, de Contrabandistes. Con anterioridad, los cargos de 2013 recibieron una placa conmemorativa en reconocimiento a su mandato que finalizó en ese acto. Para cerrar el acto, la presidenta de la Associació, Rosa Guillén, felicitó a las filaes que este año cumplen 35 años de existencia (los mismos que la fiesta de Moros y Cristianos de Altea) Cebers, Sarraïns, Cora d'Algar y Moros de Bernia. Guillén felicitó a los cargos de 2013 «por vuestra ilusión y trabajo desarrollados» y a los cargos de 2014 les animó a «disfrutar de cada momento», además de indicarles que «la Associació, que somos todos los festeros, os apoyamos en todo».

Por otro lado, ayer por la tarde tuvo lugar la romería de Sant Blai, patrón de Altea y del colectivo festero, con los nuevos cargos y los miembros de las «filaes», que se concentraron en la plaza del Ayuntamiento ataviados con sus chilabas para acompañar al santo hasta la iglesia, donde se celebró una misa en su honor y posteriormente se bendijeron los «rollets de Sant Blai». Por la noche se celebró un baile. Y hoy se reunirán todas las «filaes» para una comida de hermandad y el posterior desfile del Mig Any.