«Comedor social ya». Un grupo de ciudadanos irrumpió ayer en el pleno de Benidorm ondeando una pancarta con este lema para reclamar al gobierno local, formado por PSOE y CDL, la puesta en marcha de un comedor social en la ciudad con el que poder garantizar la alimentación básica de las familias sin recursos que actualmente viven de la ayuda de distintas ONG.
En silencio y sin gritar ninguna consigna hasta el final, los manifestantes entraron al pleno, pasearon la pancarta por todo el salón y después se sentaron en el suelo ante los grupos que conforman el ejecutivo local durante más de veinte minutos. La protesta fue en todo momento pacífica, por lo que ni se les llamó al orden ni se optó por desalojar, sino más bien todo lo contrario. De hecho, pese a la sorpresa inicial, los concejales siguieron con el debate como si nada estuviera pasando y tampoco hicieron alusión a lo ocurrido, ni durante ni después de la protesta.
La Plataforma Ciudadana por la Justicia Social, formada por distintos colectivos de izquierdas, había convocado para la una del mediodía de ayer una concentración ante las puertas del Ayuntamiento con el nombre «Bocadillo Solidario, por un comedor social en Benidorm», con el fin de llamar la atención sobre la necesidad de una instalación de estas características en la ciudad, sustentada con recursos públicos, donde dar de comer a personas a las que la crisis ha dejado sin nada. A la convocatoria, respaldada también por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de la Marina Baixa, se unieron unas treinta personas, de las cuales una decena decidió entrar en el pleno para llevar allí su mensaje.
Antes de abandonar el salón, los participantes rompieron su silencio para reprochar a los concejales su pasividad en este asunto, con frases como «Hay mucha gente que pasa hambre» o «La necesidad no entiende de política, entiende de hambre». Los manifestantes continuaron con su protesta a las puertas del Ayuntamiento y, al terminar la sesión, increparon a algunos ediles, recordando al PSOE que en su programa electoral prometió la puesta en marcha de este servicio y coreando otras frases contra los recortes, así como otras sobre futuras infraestructuras, entre ellas «Menos casinos y más comedores».
Bloqueo a la donación de menús
Miembros de la Plataforma Ciudadana por la Justicia Social lamentaron ayer que, pese a los estragos que ha provocado la crisis en muchas familias y el elevado número de personas que se han quedado en paro en el último año, Benidorm sigue sin ofrecer un servicio de comedor social donde puedan acudir a comer las personas sin apenas recursos para subsistir. Además, cabe recordar que la falta de un local donde poder repartir alimentos ya cocinados es una de las causas que mantiene bloqueada la puesta en marcha del protocolo para canalizar la donación de los menús sobrantes de los hoteles o restaurantes, que hace que decenas de kilos de comida acaben diariamente en contenedores de basura y sin que puedan ser reaprovechados.
