El promotor Enrique Ortiz ha aceptado presentar un nuevo documento del Plan de Acción Interior (PAI) Armanello de Benidorm con la exclusión de las cargas que dieron pie al Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana a anular en sendas sentencias el ambicioso programa urbanístico, que prevé levantar 3.800 viviendas en 20 rascacielos de 25 alturas.

De esta forma, el empresario alicantino considera que el tribunal podría dar por válida la ejecución de las resoluciones de nulidad, para lo que la sala ha dado de plazo hasta el próximo día 15 de septiembre.

El constructor también se muestra a favor de trasladar al sector el modelo urbanístico del resto de la ciudad, es decir, urbanizaciones dotadas con servicios en los bajos de las torres.

El planteamiento de Ortiz, que pese a la anulación del PAI mantiene la condición de agente urbanizador, se incluye en el escrito de respuesta, fechado el pasado día 22, al dictamen jurídico emitido por un asesor externo del Ayuntamiento a raíz del requerimiento del TSJ de que en caso de incumplimiento de la sentencia el consistorio podría incurrir en responsabilidades penales.

En su escrito, Ortiz discrepa inicialmente del informe jurídico del Ayuntamiento, porque «se omiten datos relativos a nuestra proposición jurídico-económica y del propio expediente administrativo de adjudicación del programa, pretendiendo dar la imagen de que la carga de 10.000 pesetas por metro cuadrado útil fue iniciativa voluntaria y particular de esta mercantil». El promotor mantiene que ese extremo fue una «exigencia que el Ayuntamiento de Benidorm había venido planteando en otros desarrollos urbanísticos del municipio».

Pese a esta discrepancia, el escrito de Ortiz concluye que, a su juicio, «lo que procede es que el Ayuntamiento requiera a esta mercantil, en su condición de agente urbanizador, para formular un nuevo documento de programa y plan parcial en los que se analice y concrete la ejecución formal de la sentencia, estableciendo las cargas de urbanización legalmente repercutibles (el 10% del suelo)».

El promotor considera que la redacción del documento no es «compleja» y puede realizarse en breve tiempo con el fin de que una vez revisado por la Corporación se remita al TSJ, «a los efectos de que pueda considerar si, con la redacción dada, pueden entenderse debidamente ejecutadas las sentencias».

En consonancia con la respuesta del promotor, la Concejalía de Urbanismo de Benidorm llevará al pleno del próximo lunes una moción para anular el acuerdo plenario del Ayuntamiento de fecha de 29 de octubre de 2002 que aprobó definitivamente el PAI Armanello y requerir al urbanizador (Enrique Ortiz) para que aporte antes del 15 de septiembre el documento del PAI en sustitución del anulado con la exclusión de las cargas declaradas ilegales por sentencias y con la consiguiente modificación del plan parcial del sector, asignando un nuevo porcentaje de cesión obligatoria, con redistribución equitativa de los nuevos aprovechamientos entre todos los propietarios».

La Concejalía de Urbanismo asegura que, una vez que el TSJ dé el visto bueno al nuevo plan y dé ejecutadas sus sentencias, firmará un nuevo convenio urbanístico con el urbanizador para la modificación de la ordenación del sector en la línea con el modelo urbanístico global de la ciudad. Esta modificación será, según fuentes de la Concejalía, mediante un concurso público al que también podrá optar el agente urbanizador.

La iniciativa del Ayuntamiento de adaptar el PAI Armanello al modelo urbano imperante en Benidorm responde a un acuerdo en ese sentido del Consejo Asesor de Escena Urbana el pasado mes de febrero.

Ortiz muestra su conformidad a la propuesta, «incluso a la suscripción de un convenio urbanístico preparatorio que regule las condiciones de la futura modificación» .