La primera consecuencia del cierre del hotel Vida & Golf de Bendidorm en plena temporada turística alta ha sido la laboral. La nómina de trabajadores afectados por el cese de la actividad del aparthotel desde finales del pasado mes marzo se eleva a una quincena de trabajadores, según datos facilitados ayer tanto por el por el sector hotelero de Benidorm y por el el sindicato UGT. De estos 15 empleados, una decena estaba contratado por empresas de servicios externos a la dirección del complejo. Estos empleados eran los encargados del listado de los tratamientos sanitarios que ofrecía el hotel a los clientes que alojaba. El resto (entre ellos la directora del centro, más dos recepcionistas y otros dos trabajadores del servicio de mantenimiento) continuaban ayer en el aparthotel desempeñado sus labores, según confirmó un responsable de UGT de Las Marinas, tras entrevistarse en la mañana de ayer con la directora del aparthotel. Estos cinco trabajadores del complejo están ahora a la espera de que cristalice la operación de traspaso del aparthotel a la firma francesa Pierre& Vacances y que el hotel vuelva abrir sus puertas al público. No obstante, la fecha de reapertura sigue siendo una incógnita para los empleados.
