Sus hijos no fueron ayer a clase y tampoco lo harán hasta final de curso si la situación se prolonga. Los padres y madres de alumnos del colegio público Vicente Lino Ferrándiz de Orxeta realizaron ayer un plante a las puertas del centro en señal de protesta por la decisión de la Seguridad Social de incorporar a las aulas a un maestro que se encuentra de baja por una enfermedad psicológica. La comunidad escolar se concentró ante el colegio a las nueve de la mañana, la hora en la que tenían que iniciarse las clases y, a continuación, abandonó el centro dejando vacías las aulas para mostrar su rechazo a esta decisión. También, para reclamar a la Conselleria de Educación que actúe y evite el regreso de este docente, al considerar que "aún no está recuperado y su vuelta podría acabar afectando a los alumnos", según indicaron desde el AMPA y el propio centro.

Este maestro interino se puso de baja el pasado mes de noviembre, afectado por un trastorno de tipo psicológico. Según indicaron fuentes del AMPA a este diario, hasta que obtuvo la baja había tenido algunos problemas de comportamiento, un hecho ratificado por "informes" que certificaban que los escolares que tenía asignados -14 niños con edades comprendidas entre los seis y los nueve años- estaban "muy por debajo" del nivel marcado. Estas mismas fuentes señalaron que el docente, incluso, llegó a abandonar el centro en horario escolar sin que nadie se hiciera cargo de sus alumnos, tras lo cual se le concedió la baja laboral.

Ahora, el Instituto Nacional de la Seguridad Social ha comunicado al maestro que debe incorporarse a su puesto de trabajo a partir de hoy mismo, a pesar de que su situación es conocida por la Conselleria de Educación, de que su médico de cabecera no recomienda el alta y de que el propio afectado ha trasladado a sus compañeros y a otros miembros de la comunidad escolar que todavía no se encuentra capacitado para hacerse cargo de una clase, según confirmó ayer el alcalde de Orxeta, el socialista José Vicente Férriz, quien a su vez es también miembro del AMPA del centro. "Sólo se ha tenido en cuenta como criterio el tiempo que lleva de baja, sin atender si quiera una valoración médica o de la propia inspección educativa, en una profesión tan sensible como la de maestro", aseguró el primer edil. Por ello, creen que "tener que volver en estos momentos, con el curso a punto de finalizar, puede crearle una situación aún más estresante".

Desde la comunidad escolar indicaron que, lejos de ir en contra del maestro, su intención es evitar que esta situación pueda acabar generándole más problemas, tanto a él como a los escolares que cursan sus estudios de Infantil y Primaria en Orxeta. También destacaron que, a diferencia de escuelas de mayor tamaño, donde el regreso del docente podría estar apoyado por otro profesor de refuerzo, en este colegio tan sólo hay tres tutores, que comparten alumnos de diferentes edades y niveles. Los padres reclaman que se le prolongue la baja, al menos, hasta que acabe el curso para que su vuelta sea "menos traumática para todas las partes".

El centro teme perder a uno de los 3 tutores hasta final de curso

Otra consecuencia que la comunidad escolar teme que pueda derivarse de esta decisión es que el colegio pierda, para lo que resta de curso, a uno de los tres tutores que ahora tiene asignados para sus 41 alumnos de Infantil y Primaria. De hecho, el profesor que ha de incorporarse hoy está siendo sustituido por otra interina, cuya plaza cesará en el momento en que el docente regrese a las aulas. "Podría darse el caso de que él regrese y necesite volver a pedir la baja, por lo que su plaza volvería a quedar vacante", destacaron desde el centro. Estas fuentes agregaron que, con el poco tiempo que queda, "apenas dará tiempo a volver a convocar y cubrir este puesto", con el consiguiente perjuicio que ello provocaría a los maestros y alumnos.