Los problemas con el Impuesto de Bienes Inmuebles en La Vila Joiosa parece que no han hecho más que empezar. Mientras los valores del Catastro, en los que se basa el IBI, están siendo tumbados por varios tribunales que, ante las denuncias de varios particulares han fallado a favor de estos y han declarado nula la ponencia de valores vigente, el último movimiento que deja aún más en el aire que se vayan a poder cobrar en 2013 los 15 millones que tiene previsto ingresar el Consistorio con este impuesto, viene de parte de la administración autonómica.
El conseller de Hacienda y Administración Pública, José Manuel Vela, ha resuelto "autorizar a la Abogacía de la Generalitat para allanarse" en los procedimientos contra los valores "de los inmuebles situados en el término municipal de La Vila Joiosa, cuando el motivo esgrimido en el recurso sea la anulación de la ponencia de valores"; es decir, la Conselleria está pidiendo a sus abogados que acepten y no recurran las sentencias contra el IBI en La Vila, tal y como subrayó el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Gaspar Lloret, quien lamentó que el gobierno local "siga adelante con el IBI cuando sabe todo esto".
El conseller reconoce en su escrito que hay varias sentencias firmes que anulan la ponencia de valores y reconoce también que las liquidaciones que están impugnando los vecinos "toman como valores básicos de suelo y de construcción los de la ponencia catastral anulada", por lo que resuelve que los abogados de la Generalitat han de "allanarse", o lo que es lo mismo, abstenerse de recurrir ningún procedimiento contencioso-administrativo en este sentido.
Sin embargo, el problema va más allá pues, aunque parece que todo apunta a que finalmente esa ponencia de valores podría ser anulada definitivamente, por el momento el Consistorio la tiene que seguir aplicando.
Así se lo han confirmado esta misma semana los responsables de la Dirección General del Catastro al propio alcalde de La Vila, Jaime Lloret, según informaron desde el gobierno local. "En una reunión con la Gerencia Territorial del Catastro de Alicante, su responsable, Margarita Aparicio, me ha trasladado cuál es la ponencia de valores vigente en nuestro municipio y además ha insistido, en presencia del secretario y vicesecretarios municipales, en que las competencias en materia de catastro dependen del Ministerio de Hacienda, es decir, que no son competencia municipal", explicó Lloret.
Esa ponencia vigente es la de 2005, la misma que anulan varios tribunales y que está ahora siendo analizada por el Tribunal Supremo, por un recurso de casación interpuesto por el Catastro, de manera que será el alto tribunal el que decida si han de anularse los valores catastrales de La Vila Joiosa en su totalidad o no.
Si se anulase antes de que se apruebe una nueva ponencia de valores, se aplicaría la ponencia de 1990, y se rebajaría enormemente la cantidad que pagan los vecinos por el Impuesto de Bienes Inmuebles. Tanto que sería inviable el Plan de Ajuste planteado por el gobierno local para reconducir las arcas municipales tras años de excesos de los sucesivos gobiernos del municipio.
El primer edil ya advirtió en el último pleno que el Ayuntamiento necesitaba sí o sí ingresar 15 millones de euros del IBI o "vendrán los hombres de negro", es decir, que el Consistorio podría ser intervenido. Si se anula la ponencia catastral, se ingresarían entre 4 y 6 millones de euros menos.
Traducido al bolsillo ciudadano, un vecino que hoy paga 400 euros de IBI y que en 2015 con las sucesivas subidas previstas pagaría 550 euros (eso sí, sólo si se mantiene el tipo), pasaría con el catastro de 1990 a pagar poco más de 80 euros.
Nuevos recortes para no subir el impuesto
Para intentar asegurar las ventanas contra el vendaval que se avecina en el Ayuntamiento de anularse la ponencia de valores del catastro, el gobierno local ya está intentando rebajar sus perspectivas sobre el IBI. La idea anunciada esta misma semana por el alcalde, Jaime Lloret, es reducir el tipo para el próximo año con el fin de que al menos en el año 2013 se pague lo mismo que en 2012 y no más. Esto implicaría que el Ayuntamiento recaudaría alrededor de un millón de euros menos, "que tendrá que compensar reduciendo los servicios y atención que se presta al ciudadano", sin embargo, así, las cifras previstas de ingresos por el Consistorio serán más realistas, ya que todo apunta a que el Tribunal Supremo podría fallar anulando los actuales valores del catastro. El gobierno local se está dando cuenta de que es muy probable que no pueda ingresar los 15 millones de IBI previstos para 2013, pero el problema se alarga en el tiempo ya que el Plan de Ajuste se basó en esos valores del catastro hasta 2015.
