Callosa d'en Sarrià tendrá un auditorio para 500 personas, pero no se sabe cuándo. El proyecto estrella que el gobierno local hondea desde 2009 y respondía a "una de las más importantes demandas sociales de las últimas décadas". según el alcalde, Batiste Saval. Sin embargo está parado indefinidamente porque "no hay más dinero", según reconoció ayer el primer edil, quien considera que lo importante no es no saber cómo ó cuando se acabará, ni los intereses de demora que cuesta al Ayuntamiento. Saval defiende que los fundamental es que el Consistorio tiene que pagar las nóminas de sus empleados a fin de mes y "no ha despedido a nadie".

Las obras del auditorio cuestan a las arcas municipales al año casi 36.000 euros (unos 9.000 euros al trimestre) en concepto de intereses de demora ocasionados por el crédito solicitado por el Ayuntamiento para cubrir la morosidad de la Generalitat.

El proyecto se dividió en dos fases. La primera sería pagada con fondos del Plan Confianza con una partida que rondaba 1,7 millones de euros y que cubriría la ejecución de la estructura del centro y su salón de actos. Dejaba para una segunda fase la construcción de la Casa de la Música, de la Danza y de las Artes, según explicaron los arquitectos cuando presentaron el proyecto hace dos años. Además, el "edificio simbólico" -como se calificó- se levantaría en una parcela de la zona de la Peita, con su entrada frente a un bulevar inexistente entonces. Por ello, el Ayuntamiento invirtió otro medio millón para la calle que conectará el auditorio, la "prolongación de la calle Ramón y Cajal y otras". Esta obra fue adjudicado por la vía de urgencia en 2010, tras licitarse la primera fase del auditorio.

Ambas obras arrancaron. La primera se ejecutó con demora, y sin que que el Ayuntamiento hubiera ingresado lo prometido por el Consell. Por este motivo, Callosa tuvo que incluir en el crédito de 2,5 millones de euros pedido este año para pagar a sus proveedores, cerca de 600.000 euros que se debían a la empresa constructora del auditorio y que iban a pagarse con la ayuda del Consell. Un dinero que antes o después la Generalitat abonará, pero no así los intereses de demora generados para cubrir su retraso, según denunció ayer el grupo de Bloc-Compromís.

Para la oposición esta circunstancia es un ejemplo más de "mala gestión del alcalde", que ha consumido "casi toda la subvención de la Generalitat en una estructura parada desde hace meses, y sin contratar ninguna empresa del municipio". Joan Tasa, edil del Bloc, recordó que su grupo avisó al gobierno local de que con la ayuda autonómica no se llegaría al final de la obra ni daría para su mantenimiento. También advirtió de que la instalación "estaba muy por encima de las posibilidades y recursos del municipio", y que acarrearía costes extras por la tardanza del Consell en pagar. Pero, según añadió, "Saval primó un fin electoralista al interés de un pueblo que, en estos momentos, no disfruta de unas instalaciones necesarias pero se ha embarcado en una serie de gastos innecesarios".

Para el alcalde, iniciar las obras era una prioridad que ahora queda relegada por las circunstancias. "El que no me entiende es por que no quiere", incidió ayer el primer edil, que insistió en que la "forma de hacer política del Bloc" no es la suya, por pedir ahora acabar un proyecto "que no aprobaron" en pleno. El boceto contemplaba un auditorio fragmentado en volúmenes, con varias alturas. Está previsto un vestíbulo de entrada de 12 metros, patio de butacas de 14 y caja escénica de 18 metros.

Los ediles callosinos, sin la extra de Navidad

El Gobierno callosino aprobó en el último pleno eliminar la paga extra de Navidad de los concejales con dedicación exclusiva y redujo al 50% las percepciones por asistencias a plenos del resto de ediles. Esta medida ahorrará al Ayuntamiento 11.000 euros anuales que se destinarán a asuntos de interés general, según explicó el alcalde. Para el Bloc, en la oposición, la medida es insuficiente, pues planteó una moción al pleno solicitando bajar el sueldo de los políticos locales hasta conseguir ahorrar más del doble, concretamente 23.720 euros al año. Con este fin proponían reducir un 10% las percepciones salariales por asistencias a plenos, comisiones y juntas de gobierno. También pedían aplicar el mismo porcentaje de bajada a los sueldos de los cuatro ediles con dedicación exclusiva y los dos cargos de confianza del alcalde. El PP votó en contra de incluir la moción en el debate plenario. r.lópez