La quinta campaña de excavaciones en el museo de la villa romana de l'Albir descubrió ayer un enterramiento infantil, el cuarto desde la primera campaña en 2008; el cadáver era un bebé, a juzgar por el tamaño del cráneo. Carolina Frías, arqueóloga y directora del Museo de la Villa Romana del Albir, declaró que es un hallazgo muy importante porque "pone de manifiesto que en el siglo VI d.C seguía habitada la villa, no funcionaba pero la zona se utilizaba como un área de enterramiento infantil, y por tanto, en las proximidades debe haber zonas habitadas".

La fosa es un espacio excavado en la tierra delimitado por piedras, donde se depositaba el cuerpo sin vida. Carolina Frías destacó que "a diferencia de otras veces, no estaba rodeada de ánforas ni objetos similares".

Las excavaciones se están llevando a cabo en la zona sur, donde pretenden localizar estructuras pertenecientes a la primera fase de construcción de la Villa alfasina. En esa parte del campo del trabajo también se descubrieron termas en campañas de excavación anteriores.

El equipo de trabajo está siendo supervisado por Carolina Frías, la directora del Museo de la Villa, y Jaime Molina, profesor titular de la Universidad de Alicante (UA). La Universidad es uno de los organizadores junto al Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Cultura y Patrimonio, y el IVAJ (Institut Valencià de Joventut).

Los recortes también han llegado a las excavaciones y este año ha desaparecido la subvención del EMCORP (Programa de subvenciones en el ámbito de colaboración con las corporaciones locales para la contratación de trabajadores desempleados en la realización de obras y servicios de interés general y social) que proporciona el SERVEF (Servicio Valenciano de Empleo y Formación).

De esta forma, el Ayuntamiento de l'Alfàs ha reconocido que gracias a su esfuerzo se han podido realizar esta campaña de excavación.

Estos recortes se traducen en dos puntos principalmente. Uno es el período de excavación, en otros años (la primera excavación fue en 2008) se extendía durante cuatro o cinco meses, sin embargo, en esta edición sólo podrá prolongarse durante un mes: comenzaron a excavar el lunes 9 y acabaran el 5 de agosto.

El otro punto clave, y el que conduce al anterior, es la contratación de trabajadores, precisamente el colectivo que trata de proteger y ayudar el Servef. En esta edición trabajarán como voluntarios 53 chicos y chicas, universitarios y procedentes del IVAJ. La gran diferencia estriba en los diez trabajadores de promedio que se contrataban en los últimos 3 años con las subvenciones, como podían ser peones, arquitectos y restauradores. En total, gracias al programa Emcorp, las excavaciones del Albir acogieron a 31 trabajadores contratados (14 en 2009, 9 en 2010, 8 en 2011) con un coste total de 232.397,84? (115.858,89? en 2009, 69.452,69? en 2010, 47.086,26? en 2011).

Los trabajos se retomaron 25 años después del hallazgo

En 2008, coincidiendo con el 25 aniversario del descubrimiento de este yacimiento, el Ayuntamiento de l'Alfàs del Pi y la Universidad de Alicante retomaron los trabajos para frenar su deterioro.Desde entonces se han encontrado varios restos de enterramientos menores que conforman una necrópolis infantil. En agosto de 2011 se encontraron los restos de un niño de entre 4 y 6 años dentro de un ánfora y bajo los cimientos de una vivienda. La peculiaridad de este hallazgo, a diferencia de los otros tres, es que estaban situados bajo los muros de una vivienda, con lo que los expertos suponen que corresponden a un rito de la época para proteger al edificio de posibles peligros.

En 2009 se encontró otro niño, también en un ánfora. Sin embargo, en esta ocasión se encontraba situado en las partes excavadas donde se descubrieron las Termas de la Villa Romana de l'Albir.

Las termas en la época romana constituían un evento diario que era considerado un modo de vida en la Antigua Roma.Actualmente, el equipo de excavación de l'Albir se está dedicando a investigar esta zona, donde esperan encontrar estructuras de la primera fase constructiva de la Villa.

La apuesta del Ayuntamiento, junto a la Universidad de Alicante, por recuperar los restos del yacimiento fue reconocida por la Generalitat Valenciana en marzo de 2011 con el reconocimiento del primer Museo al Aire Libre de la Comunidad Valenciana. C. S.