El alcalde de Benidorm, Agustín Navarro, elevó en 57.000 euros el gasto anual en alquileres entre 2010 y 2011, según denunció ayer el grupo municipal del PP. Su portavoz, Antonio Pérez, criticó así otra de las medidas anunciadas por el ejecutivo local en su plan de recortes, tras afirmar que en periodo preelectoral -antes de las municipales de mayo de 2011- el primer edil contrajo "gastos muy elevados" tanto en la contratación de nuevos alquileres como en la adecuación de dichos locales para prestar los servicios para los que se arrendaron.

El edil del PP puso como ejemplo los aseos públicos habilitados en la avenida de la Armada Española, cuyo alquiler supone un gasto de 1.062 euros mensuales; la nueva extensión administrativa de la calle Limones, por la que el Consistorio paga 2.360 euros o el traslado de la OMIC a la calle Mercado, cuyo arrendamiento asciende a 1.416 euros al mes. Pérez señaló que a todo ello se suma, también, las obras de adecuación que se realizaron en estos locales: sólo en la extensión administrativa de Limones se instaló incluso un ascensor de una planta que, según el PP, no se puede utilizar y se contrató un canal de pago, mientras que en los aseos de la Armada Española se pagaron 6.000 euros por instalar los rótulos, afirmó el edil.

En el lado inverso, desde el PP alertaron ayer de que la supresión de todos los alquileres municipales dejará a los alumnos de Conservatorio de Danza sin un espacio para poder recibir las clases de grado medio. A su vez, puso en duda las cifras dadas por la edil de Hacienda: según Guijarro, con esta medida el Ayuntamiento ahorrará 300.000 euros hasta final de año; según el PP, el ahorro será sólo de 68.000 euros anuales.