Abandona la ciudad sintiéndose un "vecino más de Benidorm". Francisco García, secretario del Ayuntamiento desde mayo de 2005, deja su cargo por razones familiares para trasladarse al Consistorio de Fuengirola. Ésta fue su última semana de trabajo en la capital de la Costa Blanca. A lo largo de estos siete años, García vivió algunos de los acontecimientos políticos y sociales más convulsos de Benidorm: al poco tiempo de tomar posesión, acaeció en 2006 la muerte de Vicente Pérez Devesa. Le tocó pues ser testigo y también parte activa de un cambio de época en la que se desarrollaron algunos de los proyectos urbanísticos más polémicos, como los planes parciales de El Murtal, Armanello y el Polígono Industrial, la estación de autobuses, la finalización de ambiciosas obras municipales como el nuevo edificio del Ayuntamiento y el Palau d´Esports, la circunvalación norte o las modificaciones del PEDUI de Benidorm, en las que se caracterizó por defender los intereses de la ciudad.

En 2009, le tocó lidiar con la moción de censura que arrebató el poder al PP para entregárselo al PSOE. Fue otra era de "dificultades jurídicas", sobre todo después de que el PP interpusiera denuncias por presuntas ilegalidades en la moción que llegaron incluso al Tribunal Constitucional. Este último organismo acabó por dar la razón a la tesis de García al defender la legalidad del voto de censura.

Con el PSOE instalado en el poder, el ya exsecretario vivió la época de la revisión de las concesiones públicas que está aún por concluir y que debería haber cristalizado en el plan de ajuste no aprobado recientemente por la corporación y en el que no fueran admitidas por el área económica municipal una serie de modificaciones para aliviar la presión fiscal sobre los ciudadanos.

García se va agradeciendo la "profesionalidad" de los funcionarios del Ayuntamiento, sobre todo de su departamento y de las áreas de Urbanismo y Contratación, con las que trabajó más estrechamente. Se marcha a Fuengirola por causas personales que no laborales, "ya que para mí Benidorm ha sido siempre un continúo reto profesional". De carácter franco y abierto, asturiano y andaluz casi a partes iguales, su paso por la provincia también será recordado en Alcoy -donde trabajó en los años 90- y en Elche, adonde llegó en 2001.