"Si los pantanos de la Marina Baixa están al cien por cien es a base del esfuerzo de los regantes de Callosa". El alcalde de Callosa d'en Sarrià, Batiste Saval, exigió ayer a las administraciones superiores y entidades hídricas de la zona que lleven a cabo "de una vez por todas" el Plan Integral de Riego por Goteo del municipio, un proyecto que lleva 7 años coleando y cuyo fin es, por un lado modernizar la principal área de producción agrícola de la comarca y por otro, ahorrar agua.

La Comunidad General de Regantes y Usuarios de Callosa d'en Sarrià reclama ayudas para hacer frente a los 10 o 12 millones de euros de coste que permitirían implantar el sistema en una superficie de entre 1.500 y 1.800 hectáreas de cultivos en plena explotación. Hoy por hoy, sólo entre un 10 y un 15%, de estas, según estimaron, tienen implantado el riego por goteo y el 90% restante sigue regando "a manta" o "por inundación". La inversión es "imposible" para los propietarios y se encarece por la complicada orografía del terreno. "De los 30 riegos" que componen la comunidad, "sólo dos y parte de otro tienen el riego por goteo" y también se incluirían en el plan porque están ya obsoletos y podrían mejorar y modernizar sus sistemas, según explicaron desde la comunidad de regantes.

Un día después de que el Consorcio de Aguas de la Marina Baixa solicitara a la CHJ medidas para permitir almacenar más agua en los embalses actuales (proponían poder llenar más los pantanos existentes, recrecer las presas, o crear represas junto a estos), el primer edil callosino expresó ayer su malestar por que el ente de gestión comarcal del agua dejara de lado el proyecto del riego en sus reivindicaciones. "Se han realizado y se están reivindicando obras de miles de millones de euros que no tienen la repercusión social que tendría este Plan Integral de Riego por Goteo", indicó Saval que lamentó, respecto al Consorcio, que "están pidiendo que se creen nuevos depósitos pero nadie le pone el cascabel al gato" y recordó que "son los regantes los que realmente tienen los derechos sobre el agua".

Para hacer sonar ese cascabel y tratar de sacar el proyecto del cajón, Saval recordó que "supondría un ahorro de más del 30% de agua" y la creación de tres nuevas balsas, en las zonas de Masataba, Segarra y las Fuentes del Algar, que sumarían una "capacidad de 7,6 hectómetros cúbicos", es decir, permitirían almacenar agua para "cubrir las necesidades hídricas de toda la comarca durante 9 meses".

Los agricultores compartían ayer este sentir. "No habrá pueblo que utilice mejor el agua que Callosa", lo decía ayer un cultivador de nísperos a pie de parcela, en uno de los pocos cultivos que tiene implantado el riego por goteo por cuenta propia. Un sistema con el que "ahorras mucha agua y le sacas mucha más productividad a un bien tan escaso", explicaba el propietario de la finca. Y que permite ahorrar también "mucho tiempo" al agricultor, que sin medios automatizados ha de estar en persona en el campo durante todo el riego. "Los pantanos están al cien por cien con el esfuerzo de los callosinos, que siguen regando en acequiero", lamentó el primer edil de Callosa, que insistió en que el riego por goteo es una "reivindicación de primer orden" para "la competitividad" de la agricultura local.