Los cultivadores de nísperos de Callosa d'en Sarrià están "muy preocupados" por las heladas registradas durante la pasada semana y previstas para los próximos días. Así lo expresaba ayer el presidente de la Cooperativa Agrícola de Callosa, Francisco Pérez, quién destacó que "la helada ha tocado ya algo" los frutos, aunque los daños todavía no son cuantificables, máxime cuando las previsiones para esta semana marcan termómetros bajo cero durante al menos dos días. "Estamos preocupados porque en cuanto baje a cero la temperatura, el níspero se empieza a helar", explicó Pérez. Y para el miércoles y el sábado próximos, los termómetros marcan temperaturas inferiores.

Los agricultores toman medidas desesperadas para intentar combatir el frío. Entre ellas, encienden hogueras nocturnas para evitar que caigan las temperaturas o retrasan las labores de aclareo del fruto, incluso llegan a realizar prácticas de "alto riesgo", sólo aptas para especialistas, como es provocar ellos mismos una congelación superficial del níspero que actúe de iglú y evite así daños en el fruto.

Todo para evitar una mala cosecha, después de que el pasado año los agricultores callosinos cerraran la temporada con más de 3 millones de euros en pérdidas tras el cierre de los mercados internacionales y el desplome del consumo por la crisis del pepino, que afectó a todas las frutas y hortalizas españolas.

Los daños ya se han hecho notar esta semana, cuando se está realizando el aclareo de los árboles, pero precisamente por eso, los agricultores son algo más optimistas. Esta técnica consiste en eliminar parte de los frutos cuando están en flor o en fases tempranas de crecimiento para obtener nísperos de mayor tamaño y calidad. "Muchos están retrasando el aclareo, para eliminar luego los frutos que estén dañados y dejar los buenos", explicó Pérez.

La Unió de Llauradors emitía ayer un comunicado para informar que los cultivos valencianos no se han visto excesivamente afectados por las heladas gracias al viento, que en muchas zonas ha minimizado los efectos. Sin embargo, según constata el sindicato agrícola, "en Callosa d'en Sarrià las temperaturas llegaron a alcanzar los -2 grados y han tocado los ni?speros", aunque precisaron que "en el caso de haber bajado au?n ma?s se hubiera visto afectada la mayor parte de la produccio?n" y añadieron que todavía "es muy pronto para evaluar los posibles dan?os en estos cultivos hasta ver la evolucio?n".

Cierre de mercados y desplome de precios

Los agricultores de Callosa están preocupados por partida doble ya que, de verse afectada la producción de este año, se enfrentarían a una segunda campaña consecutiva "desastrosa", como resultó la pasada temporada debido a la crisis del pepino. Las pérdidas registradas rondaron los tres millones de euros debido al cierre de los mercados internacionales, principalmente el italiano, donde los callosinos exportan el 60% de la producción total de nísperos. El bloqueo en la comercialización y el descenso en el consumo puso en jaque a todas las frutas y hortalizas españolas y, en el caso del níspero, obligó a "malvender" 6 de los 14 millones de kilos cosechados, según informaron ayer fuentes de la Cooperativa Agrícola de Callosa. El precio, en el último tramo de la comercialización se desplomó hasta cerrar la campaña con un promedio de 20 céntimos menos por kilo, según indicaron.