Un total de 145 parejas han disputado este fin de semana en Benidorm el IV Campeonato Europeo de Futbolín español. Sí, español, que es en el que los jugadores clavados a las barras tienen dos piernas para pegar al esférico, en vez de una sola, como ocurre con otra modalidad de futbolín cuyo origen sigue sin estar claro, según afirmaron ayer los expertos citados en Benidorm para jugársela a este particular deporte de mesa.

Aunque el tipo de futbolín fuera el español, la competición estaba abierta a nacionalidades europeas. Según parece, la afición por este juego no es sólo cosa de españoles, ya que cada vez cuenta con más adeptos en otros países europeos. Claro que, según parece, quienes juegan cada vez más son los chinos. Desde hace años se exporta al país oriental este juego que emula el deporte rey a golpe de muñeca... y de moneda de euro (desaparecida la de 20 duros).

El torneo de Benidorm (jugado en el hotel Bali) fue organizado por la Federación Internacional del futbolín de Dos Piernas, y ha resultado ser el que ha repartido más dinero en premios, hasta 18.000 euros, de la historia en nuestro país.

Los campeones absolutos fueron Alejandro Carnicero y Sergio Gómez, pareja de Zaragoza que regresa a casa con un premio de 5.000 euros en metálico. Los subcampeones, de Huelva, Raúl Cabello y Miguel Sucino, se llevaron 2.000, y la tercera pareja (los sevillanos Diego Amaya y José María Cabello), 1.200 euros. Además, hubo otros 21 premios más. Pero no todo era el dinero y diversión. Según explicó el delegado de la federación, Juan José Exposito, la prueba puntuaba para el ranking nacional que se celebra de octubre a septiembre por varias ciudades y con diferentes categorías. La de Benidorm fue la primera prueba de categoría especial de la temporada (y segunda nacional). Además, el viernes celebraron un campeonato de selecciones provinciales al más alto nivel... Para que luego digan que las horas echadas jugando al futbolín no llevaban a nada.