El gobierno local de Benidorm aplicará en lo que resta de año un importante tijeretazo para intentar paliar el desfase económico que arrastra en materia de Personal y compensar este déficit con el ahorro de unos 5 millones de euros a partir de 2012. Y lo hará reduciendo la plantilla municipal -ahora de 1.060 empleados- en cerca de 200 trabajadores a corto y medio plazo y, además, cerrando el saco de los complementos de productividad que, a fecha de hoy, perciben casi la mitad de los trabajadores con nómina en el Ayuntamiento, según expuso ayer la concejal de Hacienda y Personal, Natalia Guijarro, durante una reunión a tres bandas con los grupos de la oposición y los sindicatos.

Entre las medidas que el ejecutivo de Agustín Navarro pretende aplicar "con carácter inmediato", y que no necesita llevar a pleno al ser una competencia directa del alcalde, destaca la prejubilación "obligatoria" de 98 funcionarios a partir de los 62 años, lo que dejaría vacantes casi un centenar de plazas -principalmente en áreas como la de Servicios Técnicos o instalaciones deportivas- y permitiría un ahorro anual de 4,2 millones de euros anuales, según los datos de la propia concejal. Guijarro manifestó que todos los trabajadores forzados a la prejubilación podrán percibir "el cien por cien de la pensión" y añadió que, si en algún caso no fuera así, "se les excluiría del expediente de prejubilación forzosa hasta que alcancen los 65".

La segunda de las medidas previstas por el equipo de gobierno, y que ya anunció el pasado viernes el alcalde Agustín Navarro, pasa por el despido -para el gobierno "no renovación"- de 46 de los 56 empleados temporales, cuyos contratos finalizan en lo que resta de año y a los que no se les ampliará por más tiempo. El primer cupo de trabajadores afectados por esta medida, algunos de los cuales llevan varios años prestando sus servicios para el Ayuntamiento, está compuesto por 27 personas que finalizan contrato el próximo 30 de septiembre. A ellos se sumarán otros 19 entre octubre y diciembre hasta abarcar los 46 anunciados, lo que permitirán un ahorro de 561.000 euros en los tres meses que restan para acabar el año. Los únicos que se salvarán de este despido son los diez policías locales interinos, a los que sí mantendrán en sus plazas "por necesidades del servicio", según señaló Guijarro.

El cuerpo de la Policía Local será uno de los colectivos que más perjudicados se verán por los recortes previstos por el gobierno local, tanto por los que se refieren estrictamente a la plantilla como por los de los complementos de productividad. En primer término, porque el plan presentado ayer también prevé no renovar la bolsa de trabajadores adscritos al Ayuntamiento de Benidorm en comisión de servicios y que sacaron su plaza en otras administraciones públicas. En Benidorm hay 17 personas en esta situación, casi en su totalidad pertenecientes a la plantilla de la Policía, y que deberán regresar a sus administraciones de origen conforme vayan agotando los plazos establecidos. Para paliar esta marcha en el cuerpo de la Policía Local y reducir también el actual número de interinos, el gobierno prevé convocar una oposición para crear al menos 15 nuevas plazas que puedan ser cubiertas "de forma definitiva", manifestó la concejal.

En segundo lugar, porque el recorte de productividades previsto por el ejecutivo afectará en bloque a toda la plantilla policial. La edil de Personal anunció que de los 513 funcionarios que perciben este tipo de remuneraciones, se incluyen los 240 agentes de la Policía y que perciben el que se llamó en su día "plus de asistencia", un complemento de unos 250 euros mensuales de media que desde el año 2005 se abona a cambio de que los policías no falten al trabajo ni un solo día de los que tienen de turno, lo que por tanto implica no coger días de asuntos propios, bajas por enfermedad u otro tipo de permisos. Este complemento, que al año supone un gasto anual de 956.000 euros para la arcas públicas, se verá reducido como mínimo en un 50% de manera "innegociable", avanzó Guijarro. La edil, no obstante manifestó que la medida se llevará a una mesa de negociación para estudiar "qué derechos quieren recuperara cambio de este plus".

Además de a la Policía, el Ayuntamiento también revisará los complementos de productividad a otros 273 funcionarios, que perciben mensualmente pluses por valor de entre 11 y 2.200 euros, lo que anualmente genera al Consistorio un gasto extra de 974.125 euros. Guijarro expuso que los más bajos se consolidarán en la VPT, pero que el resto se suprimirán o se revisarán a la baja en un 50%, como también ocurrirá con las contrataciones externas o las que se realizan a través del Servef, que se pretenden reducir de 86 a un máximo de 40. Desde el gobierno indicaron que todas estas medidas se acompañarán de una "regularización y reorganización" de la plantilla, para cubrir las plazas que queden vacantes, lo que posteriormente irá a acompañado de una oposición pública para sacar "las plazas que necesarias".

Desde la oposición, PP y CDL calificaron el plan de ajustes en Personal como un "ERE encubierto" y criticaron que el gobierno "lo hayan impuesto en lugar de negociarlo".

GOBIERNO LOCAL

Guijarro: "Un plan necesario y que afecta lo mínimo"

La portavoz del equipo de gobierno de Benidorm, la socialista Natalia Guijarro, destacó ayer la "necesidad" de aplicar las medidas presentadas ayer a sindicatos y oposición para recortar gastos públicos y, a su vez, señaló que el ejecutivo local ha optado por "las que menos afectan a los trabajadores, tras un intenso trabajo en todo el departamento de Personal". La concejal de Personal y Hacienda también destacó que el plan "no supone el despido de ni un solo trabajador de este Ayuntamiento", aunque no se renovarán contratos temporales que llevan prolongándose varios años. Guijarro lamentó que muchas medidas, "sobre todo las de productividades, no agraden mucho a los sindicatos", pero insistió en que "todas son necesarias y se va a aplicar", junto a otras ya anunciadas, como los recortes en las subvenciones de Fiestas o de Deportes.