Hay quien lo ha definido como "un auténtico jarrón chino" parafraseando el símil que en su día hizo Felipe González sobre la función y el valor de los expresidentes de Gobierno de España. Y es que el Paseo de Poniente de Benidorm ha sido muy costoso económicamente. También ha costado mucho tiempo llegar a hacerlo (y quedan dos fases más por desarrollar). Y su diseño (realizado por Carlos Ferrater y Xavier Martí) ha sido premiado por la élite de la arquitectura nacional e internacional. Pero va por libre.

Tres años después de que fuera inaugurado continúa dando la espalda a la realidad social y económica de quienes viven y trabajan en él. Así lo manifiesta la mayoría de comerciantes y restauradores de la avenida de la Armada Española que transita paralela al paseo pero independiente a él. La actividad empresarial de la zona se ha renovado (más de la mitad de empresarios consultados ha abierto sus puertas con el nuevo paseo en marcha) pero sus inversores no hacen la caja esperada. Tampoco la hacen quienes estaban de antes, cuando el paseo lo conformaba la vieja balaustrada. Según afirman, la vanguardia y el color del nuevo bulevar marítimo ha llevado a la zona más gente pero no más dinero. Alguno de sus comerciantes ha bautizado el área como "la de las tres P: pipas, paseo y playa, que es de lo único que hacen gasto los que pasan por aquí".

Independientemente a lo que gasten, todos coinciden también en que aunque su acera está a escasos metros del paseo, es como si estuviera muy lejos porque la gente no cruza.

Ven a la carretera que los separa como una frontera de difícil paso. "Está muy bonito, pero no se ha integrado con los locales comerciales, a la gente le cuesta mucho cruzar, deberían haberlo hecho como en el paseo de Levante, con acceso al tráfico restringido, y sin desniveles, pero también son necesarias salidas rápidas que no hay, así que no sé cómo podría arreglarse", explica Isidro, uno de los comerciantes.

Su opinión coincide con la de sus vecinos. También hay muchos que comparten la crítica al hecho de que la avenida, no siendo peatonal, tampoco haya previsto en dejar sitio donde aparcar ni para carga y descarga, "ni un momento para bajar a comprar algo y seguir". Además, la falta de aparcamiento impide que se acerquen clientes de otras zonas a los establecimientos de Poniente, como lo hacen en otras zonas como Levante y de La Cala de Benidorm, según expusieron varios restauradores.

Pese a todo, hay una decena de locales que han abierto sus puertas en los últimos seis meses pensando pensando que el nuevo diseño provocaría un revulsivo económico para la zona.

Aún así, muchos reconocen que el hecho de que no estén integradas urbanísticamente las dos partes de la avenida no es la única circunstancia que podría ocasionar que algunos locales tengan que cerrar tras el verano. La crisis y el poco poder adquisitivo de quienes llegan son, según apuntan, los otros factores que están haciendo de éste uno de los peores veranos para estos pequeños empresarios.

Por eso, hay quienes piden al Ayuntamiento activar la zona con nuevas actividades. Ya sean ferias, competiciones deportivas en la playa, u otros eventos que sirvan de reclamo para que el resto de la ciudad acuda a conocer esta zona, abandonada desde hace años en el aspecto comercial, tanto por el Ayuntamiento como por algunos propietarios de locales.

En este sentido, varios vecinos añadieron que parte de locales del paseo "pertenecen a las mismas personas, que piden alquileres muy altos y prefieren mantenerlos cerrados a pedir menos aunque con eso consigan que haya zonas que de miedo pasar por la noche de lo vacío que está... y sin apenas policía". Comerciantes arrendados también citaron tal circunstancia. "Si trabajas a todas horas y sólo te da para pagar el alquiler, prefieres cerrar...".

Esperan no tener que hacerlo confiando en que este agosto las cosas vayan mucho mejor. De momento, en 20 días inaugurarán la Vuelta Ciclista a España. Claro, que ésta además de deportistas, también generará obras...

Intento de edificar en el solar libre existente en primera línea

Desde hace décadas llama la atención que en plena primera línea de la playa de Poniente un solar permanezca vacío. Pertenece a tres propietarios diferentes (uno desconocido) que, pese a pasar las décadas intentándolo, nunca han llegado a un acuerdo para edificar en él, según explicaron los vecinos. Ahora, nuevamente, una de las partes quiere volver a intentarlo con el reclamo que supone el nuevo diseño del paseo. Para ello ha presentado un programa de actuación aislada para edificar haciendo uso del conjunto total del solar, localizado en suelo urbano clasificado dentro del "Área de Conservación de la edificación", de Benidorm.

El proyecto de la futura construcción, presentado en el Ayuntamiento de Benidorm, contempla la edificación de 30 viviendas, con garajes, más locales, distribuidas en un edificio de seis plantas que dispondrá de también de piscina comunitaria.

El edificio ocupará, si consigue ejecutarse, una superficie de 412,45 metros, que supondrá tener una edificabilidad de 2.228,701 metros cuadrados. La parcela está ubicada próxima al puesto de la Cruz Roja de Poniente, entre los edificios Gavina y Principado B (calle Doctor Pérez Llorca), la avenida de Alcoi, y las calles Virgen del sufragio, Pintor Lozano y Ricardo.