Vecinos de Atzúvia han denunciado ante la Sindicatura de Greuges que las emisiones de polvo de una cantera de cal situada en el término municipal de Pego están afectando a la salud de los habitantes de esa localidad y a las estructuras de sus viviendas.

En una recomendación, el Síndic de Greuges atiende la queja de unos vecinos de Atzúvia en la que alertan de las consecuencias de la explotación de una cantera situada en el término municipal de Pego, con autorización para triturar piedra y fabricar cal desde agosto de 1963.

El consistorio de Pego renovó esta licencia en septiembre de 2007 tras considerar que la actividad de la cantera no se había modificado de forma "sustancial", pese a que había incrementado la capacidad extractiva.

Los vecinos apuntan a que es posible que una emisión "excesiva" esté provocando una afección "intolerable" sobre la salud de los ciudadanos, mientras que las viviendas de Atzúvia están sufriendo desperfectos como consecuencia de "las explosiones en la zona minera".

Además, sostienen que la autorización concedida en 1963 y renovada en los mismos términos en 2007, para unas instalaciones que "al menos" cuentan con dos molinos de trituración, no cuenta con "la cobertura legal vigente" ni tampoco la del PGOU de Pego.

La explotación de piedra se encuentra a menos de 500 metros del núcleo urbano de Atzúvia, aseguran los vecinos, quienes solicitaron al Ayuntamiento de Pego en 2008 que revisara la licencia concedida apenas un año antes a la mercantil que explota la cantera, Pavimentos Bituminosos Serrano.

El consistorio de Pego respondió a la institución fiscalizadora que la cantera cuenta con "la oportuna licencia de actividad para la explotación, extracción y trituración de áridos" desde 1963.

El Ayuntamiento recuerda que en julio de 2009 realizó una inspección a la actividad extractiva para comprobar si era necesario adoptar medidas para evitar molestias, que concluyó con el envío a la empresa de informe en el que solicitaba "medidas correctoras" de las voladuras realizadas en la cantera.

Dado que la versión de los vecinos de Atzúvia y del Ayuntamiento de Pego ofrecen versiones "contradictorias" y no aportan pruebas documentales, el Síndic, José Cholbi, ha pedido al consistorio que elabore un informe para determinar si las instalaciones de la cantera han sido modificadas "sustancialmente" desde 1963. En caso afirmativo, Cholbi cree necesario que se estudie si se deben modificar las autorizaciones.