Una vecina de Benidorm ha anunciado que reclamará daños y perjuicios al Ayuntamiento de la localidad, por medio de una denuncia, tras sufrir una grave caída debido a las obras del nuevo puente de Emilio Ortuño. El accidente le provocó diversas heridas, entre ellas, una triple rotura en el hombro de la que tuvo que ser intervenida de urgencia y en cuya operación tuvieron que colocarle una placa de titanio y cerca de quince tornillos, que le han dejado una gran cicatriz en el brazo izquierdo. La víctima todavía se recupera de las secuelas que le provocó la caída, tiene la movilidad del brazo muy reducida y afirma que, junto a los daños físicos, también está sufriendo secuelas psicológicas debido a la imposibilidad de llevar a cabo tareas tan simples y cotidianas como peinarse o poderse vestir sin ayuda. Tanto ella como su abogado confirmaron a este diario que ya han notificado al Ayuntamiento todos los hechos a través de un burofax, en el que además solicitaron las imágenes tomadas por las cámaras de vigilancia de tráfico situadas en esa misma vía y están a la espera de poder disponer de ellas para adjuntarlas a todos los informes médicos y poder formalizar la denuncia.

Según relataron ambos, los hechos ocurrieron el pasado 30 de marzo, cuando la mujer, con iniciales A.R.S., paseaba por la calle Pont, la que discurre por debajo del puente, junto a su madre y otra amiga. En su camino se cruzaron varias losas de cemento, que sirven como soporte a las vallas de obra, y que ese día estaban apiladas una encima de la otra en mitad de la acera. Pasaba más gente por la calle y esta vecina, que indica que caminaba atenta a su madre, no vio las losetas porque no estaban señalizadas con ningún elemento visual que advirtiera de su presencia. Así que tropezó con ellas y se dio de bruces contra el suelo.

No es la única

Hasta el lugar, tal y como afirmó ayer, se desplazaron varios agentes de la Policía Local y Nacional, así como una ambulancia, que trasladó a la víctima hasta el hospital, donde en menos de veinticuatro horas tuvo que ser intervenida del hombro para soldar las roturas, según manifestó A.R.S, quien explicó que ahora ha querido denunciarlo públicamente consciente de que "no soy la única, aunque puede ser que sí la más grave, porque sé que más personas se han caído por culpa de la mala señalización de estas obras".

Tanto la mujer como su madre, que la acompañaba cuando ocurrió la caída, se lamentaron ayer afirmando que este accidente "se podría haber evitado si hubieran señalizado y hubieran tenido más control durante las obras", a lo que la madre agregó que en cuanto la ambulancia trasladó a la víctima "los obreros quitaron rápidamente las losas de mitad de la acera, porque sabían que eran las que habían provocado el accidente".

El representante legal de esta mujer explicó que han solicitado formalmente al Consistorio que aporte las imágenes de las cámaras de control de tráfico que hay en las inmediaciones del puente, pero agregó que hasta el momento no han podido tener acceso a las mismas. Además, señaló que disponen de testigos y que siguen a la espera de las imágenes y de que concluyan todos los informes médicos y periciales para poder adjuntarlas a toda la documentación y, de esta forma, presentar oficialmente una denuncia, con una reclamación al Ayuntamiento por responsabilidad patrimonial que todavía no han cuantificado.

Obra necesaria y controvertida

La obra para elevar el puente de la vía Emilio Ortuño, pese a ser necesaria para evitar los múltiples accidentes de autobuses y camiones que quedaban atrapados debajo de la infraestructura por incumplir las señales de prohibición, ha sido controvertida desde el primer día por los múltiples retrasos y sobrecostes sobre el plazo y presupuesto inicialmente previstos. El edil de Seguridad y promotor del proyecto para elevar el puente, José Bañuls, dijo ayer desconocer el caso concreto de esta caída, pero dijo que se estudiará para determinar las causas del mismo y si hubo responsabilidad por parte de la empresa constructora con una mala praxis.