A falta de debates entre candidatos o cruces de promesas electorales, en esta campaña los grandes partidos han decidido librar su batalla en la calle. Por separado, aunque con algunas excepciones, como los mercadillos, los líderes y militantes apenas han coincidido en actividades para captar nuevos electores. A excepción de un escenario: la sede de Correos, cuyas inmediaciones se han convertido estos días en el punto más caliente de la campaña electoral, hasta el extremo de forzar en varias ocasiones la intervención policial y de registrar, por el momento, hasta dos denuncias en contra de los socialistas.

La presencia de afines o militantes del PSOE en la oficina postal, que tiene un local electoral en la avenida de L'Aigüera, a escasos metros de la sede central de Correos, ha sido la tónica predominante desde que arrancó la campaña. También la de afiliados o simpatizantes que trabajan en la campaña del PP. Y es que los inciertos y posiblemente ajustados resultados que se presumen de cara a las votaciones del domingo, han llevado a ambas siglas a echar en resto en Correos para intentar captar todos los votos indecisos posibles, aunque en ocasiones hasta más allá de lo que podría considerarse "lógico" en una contienda electoral.

A escasas horas de que concluya el plazo oficial para ejercer el voto por correo, que expira hoy, la sede postal de Benidorm acogió ayer imágenes más que tensas entre miembros de uno y otro partido. La Policía Local tuvo que intervenir a primeras horas de la mañana después de que un hombre, al parecer afín a los populares, se identificase como agente de la Policía Nacional y como "amigo de Rubalcaba" tras comprobar que personas de la sede electoral socialista acusaban a otro hombre, más joven y supuestamente también del PP, por acompañar a votar a varias personas de nacionalidad extranjera, como indicaron a este diario miembros de cuerpo policial. Hasta el lugar tuvieron que desplazarse agentes locales, quienes identificaron al hombre que decía ser policía y, tras comprobar que en realidad no lo era, abrieron diligencias por los hechos, según aseguraron fuentes de la agrupación del PSOE de Benidorm, quienes censuraron públicamente estas prácticas por parte del PP.

Pero ésta no es la única trifulca registrada durante estos días en Correos. Este diario tuvo ayer acceso a una denuncia presentada por un miembro del PP de Benidorm, después de que la tarde del pasado martes se produjera otro incidente en esta misma sede postal. Según relata la denuncia interpuesta en Comisaría, el denunciante asegura que acompañaba a una persona de edad a Correos cuando un hombre que participa en la campaña del PSOE le increpó: "Estoy harto de ti y de que traigas a gente aquí, robando votos", tras lo cual esta misma persona rompió al denunciante un sobre que llevaba con documentación y también su DNI. El afectado manifiesta que los hechos ocurrieron entre las siete y las siete y media de la tarde y traslada en la denuncia su temor a que "se repitan hechos similares o que incluso puedan llegar a mayores", a lo que adjunta una petición para que se incorporen a la denuncia las imágenes de las cámaras de vigilancia de la sede postal por si hubieran podido captar lo sucedido. Y, aunque en el documento no identifica a la persona que supuestamente le agredió, sí da un nombre: "Antonio", quien según dirigentes del PP local sería el marido de una integrante de la candidatura de los socialistas.

"Tacos de votos"

Los populares también denunciaron ayer públicamente que dentro de la propia sede de Correos habría "tacos de papeletas" de Agustín Navarro y lamentaron que hechos como los acaecidos estos días "podrían haberse evitado si se hubiera atendido nuestra petición de poner custodia policial" en la sede postal, tal y como reclamaron la pasada semana ante la Junta Electoral de Zona, sin hasta la fecha haber obtenido respuesta. Esta petición deriva de otra denuncia, presentada también la pasada semana en Comisaría por una vecina de Benidorm, y en la que afirmaba que afiliados socialistas ataviados con la camiseta roja del partido -que incluye el nombre de su alcaldable, Agustín Navarro- pululan por la sede postal, "incitan" a algunas personas que se encuentran en la misma a que les acompañen por un instante al local electoral y las "llevan" después a votar a Correos.

Los socialistas, por su parte, aunque no han denunciado formalmente los hechos, también acusaron el martes a la candidatura que lidera Pérez Fenoll de acompañar a votar a correos a "gente en estado de embriaguez o con sus facultades mentales perturbadas".

Y, entre altercado, denuncia y acusación, algunos trabajadores de Correos consideran "inaudita" la situación y los ciudadanos que acuden a la sede postal a cualquier otro trámite deben pensar: "Ver para creer".