Entre 2002 y 2006, la empresa valenciana Mundosentido2 Eventos S.L. vivió tiempos de gloria en Benidorm al obtener del Ayuntamiento, gestionado por el PP, prácticamente la totalidad de la organización de los grandes conciertos que se celebraron en la época. En la mayoría de los casos, la mercantil, creada en 2002 , no necesitó participar en ningún tipo de concurso para gestionar aquellos eventos ni se vio obligada a dar cuentas de lo que hacía con el dinero que le ingresaba el Consistorio o con los ingresos recaudados en la taquilla. Aquellos privilegios en forma de monopolio tuvieron dos grandes protagonistas, el ex alcalde Vicente Pérez Devesa y el concejal de Cultura hasta 2003 y después delegado de Alcaldía para Grandes Eventos, José Amor. También un gran enemigo, el PSOE. Una denuncia de los socialistas ante Fiscalía provocó que resultaran imputados por aquellas presuntas irregularidades Pérez Devesa y Amor, aunque la causa resultó finalmente archivada. No obstante, el partido que ahora lidera el actual alcalde, Agustín Navarro, no cejó en su empeño y ahora una auditoría que pretende fiscalizar los ejecutivos del PP demuestra que la trayectoria de la empresa sigue plagada de preguntas sin respuestas. La auditoría le ha servido así al alcaldable del PSOE para practicar una especie de venganza poética y devolver con cierto oportunismo la polémica de los grandes eventos a la primera fila del debate electoral.

Desde su más tierna infancia, Mundosentido2 tuvo bien claro que organizar espectáculos en Benidorm era su vocación: obtuvo su primer contrato en la ciudad turística, el del concierto de Elton John, el 10 de abril de 2002, esto es, sólo 35 días de formalizar el 6 de marzo de aquel año su inscripción en el registro mercantil. Aquella celeridad despertó las primeras sospechas de la oposición, que se acrecentaron cuando un año después la empresa obtuvo un aval bancario de 348.000 euros para poder cobrar del Ayuntamiento un adelanto del contrato para la actuación de los Rolling Stones. El entonces portavoz del PSOE, que no era otro que el propio Navarro, se preguntó cómo una empresa que sólo tenía 3.008 euros de capital social (el mínimo para ser una sociedad limitada) había logrado que la avalaran por una cantidad 115 veces superior. El contrato con el grupo británico acabó costando, precisamente, 348.000 euros. Los auditores también constatan algo que los socialistas, por sus declaraciones públicas, ya sospechaban en aquella época: que Mundosenti2 no era más que un intermediario entre el Ayuntamiento y la empresa que realmente tenía los contratos de exclusividad con los diferentes artistas. De ahí -explicaba en 2003 Navarro- que no necesitara patrimonio.

2003 fue un buen año para la mercantil administrada por Lorenzo Pérez, que organizó varios conciertos más y mantuvo contratos con otras instituciones públicas de la Comunidad. Pero lo mejor le llegó en 2004, cuando firmó, también sin concurso de por medio, un contrato por 1,1 millón de euros para organizar 6 conciertos de los que sólo se celebraron 4. Por estos hechos, el PSOE denunció a la Fiscalía a Pérez Devesa y Amor. Este último, concejal de Cultura hasta 2003 y en ese momento cargo de confianza de Alcaldía, era el gran valedor de Mundosentido2 y aparecía como persona de contacto en las cartas que el primer edil enviaba a empresas e instituciones de la ciudad con el fin de pedir ayuda económica para aquellos eventos. Además de esas aportaciones extras, la empresa también tenía derecho a los ingresos por taquilla. Los dos encausados negaron los hechos y la Fiscalía Anticorrupción ordenó una investigación que fue archivada por un juzgado de Benidorm en 2006 al no apreciar indicios de delito y tras el fallecimiento de Pérez Devesa.

En 2005, algo cambió: por primera vez, el Consistorio decidió organizar un concurso abierto para que varias empresas pudieran presentarse a la organización de los eventos. El concejal de Contratación de la época, Miguel Llorca (hoy en las filas del CDL) anunció entonces que la Mesa de Contratación había decidido adjudicar el concurso de nuevo a Mundosentido2, que se impuso a otra empresa gracias a su "oferta artística, técnica y organizativa". Llorca agregó que la adjudicación no debía ser sometida al pleno ya que el alcalde tenía atribuciones para decretarla. Sin embargo, los auditores que ahora en 2011 han investigado el asunto aseguran que no queda en el Consistorio ni un solo documento que arroje luz sobre las razones por las que se eligió a Mundosentido2. Otro misterio por resolver.

Gracias a aquel proceso, en 2005 y 2006 la mercantil obtuvo la organización de "Grandes Espectáculos Musicales", por los que obtendría al año 1,095 millones de euros. La firma creó entonces el Benidorm Music Meeting, marca musical que pretendía competir con otros festivales de vanguardia como el FIB de Benicàssim y servir de reclamo turístico. No obstante, el BM05, que se celebró durante julio de aquel año con Jamiroquai y James Brown como cabezas de cartel, apenas congregó 25.000 espectadores. Y la edición del siguiente año, el BM 06, volvió a desatar la polémica, toda vez que sólo se celebraron 4 conciertos y no los 6 que había pagado el Ayuntamiento. Los artistas fueron Joaquín Sabina, Bryan Adams, The Cult y Marc Anthony. Este último, eso sí, logró congregar en octubre de aquel año a 20.000 espectadores.

El día en que Pérez Fenoll le dijo no a José Amor y al máximo responsable de la firma

La trayectoria de Mundosenti2 y especialmente su abrupto final simbolizan también las fricciones internas que han desgarrado durante los últimos años al PP y que han acabado por provocar su escisión ante las actuales elecciones. No en balde, la estrella del delegado de la Alcaldía para Grandes Eventos, José Amor, padre de la actual candidata del CDL y expresidenta del PP, Gema Amor, y uno de los hombres fuertes del entorno del fallecido ex alcalde Vicente Pérez Devesa, se apagó cuando Manuel Pérez Fenoll llegó al poder. A finales de 2006, concluida la relación contractual entre Mundosentido2 y el Ayuntamiento, Amor realizó una comparecencia conjunta con el administrador de la firma, Lorenzo Pérez, para hacerle a Pérez Fenoll un ruego: que prorrogara dos años más la concesión a la mercantil. Y a la vez, que ampliara a 40.000 espectadores la capacidad del estadio de Foietes para traer a estrellas del rango de U2 o Madonna. Por cierto, que en esa misma comparecencia Amor se negó de nuevo a dar datos económicos relacionados con el BM06 porque "el pliego de condiciones no dice que el Ayuntamiento tenga que fiscalizar a la empresa".

Sin embargo, Pérez Fenoll, quien iba a alejarse del núcleo duro del "perezdevesismo", tenía otros planes. Y en febrero de 2007 anunció que el contrato que hasta aquel momento había vinculado al Consistorio con Mundosenti2 no sería renovado. Llama así la atención que buena parte del contenido de la auditoría sobre los grandes eventos que ahora ha encargado el PSOE sobre la gestión de los gobiernos populares salpique al CDL, ya no sólo por la vinculación familiar de Amor con la alcaldable de esa fuerza política, sino también por el hecho de que el concejal de Contratación entre 2003 y 2007 fuera Miguel Llorca, que en estos comicios también concurre por los independientes.

No obstante, la auditoría también revelaba irregularidades -sobre todo falta de documentación y de garantías legales- en los conciertos de la era de Pérez Fenoll que protagonizaron entre otros y hasta 2009 David Bisbal, Julio Iglesias o Bruce Springsteen.