Bernabé Cano, alcalde de La Nucía y candidato a la reelección, por el PP, se dio ayer un baño de multitudes en el acto principal programado en su campaña, previo al que cerrará la misma, y sin ayuda de ninguna figura del Consell ni miembro destacado del partido a nivel autonómico. Cano llenó el parking del cementerio con una "marea azul" que lo inundó todo, incluidos los aledaños, y que cifraron en cerca de 4.000 personas, computadas en función del número de raciones repartidas de paella y de la hamburguesa gigante con las que invitaron a los presentes en la festiva jornada en donde se dejó notar la presencia de los residentes extranjeros del municipio.

La fiesta empezó sobre a mediodía, y además de la comida, el líder del PP nuciero no escatimó en elementos de divertimento para todos, sobre todo para niños, para quienes organizó teatro, rocódromo, hinchables, etc. Antes del ágape fueron los discursos. Primero, de Pedro Lloret, dos de la candidatura, seguido de Bart Gommans, cuatro, que agradeció la asistencia en diferentes idiomas como guiño a la comunidad extranjera. Después, cerró el turno el candidato, visiblemente emocionado ante el lleno de la convocatoria. Tanto, que por primera vez obvió citar la lista de inversiones y proyectos para limitarse a agradecer la asistencia que dijo superó las expectativas.