Los parques temáticos de Benidorm, los dos últimos que abrieron sus puertas -Terra Mítica y Terra Natura- no atraviesan por su mejor momento y, además, la crisis económica ha contribuido a empeorar aún más su situación. Terra Mítica tuvo que encomendarse a unos nuevos gestores para tratar de enderezar el rumbo y éstos lo primero que hicieron fue plantear un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) extintivo en algunos casos y temporal en otros.

Terra Natura ha seguido sus pasos y también ha ejecutado un ERE extintivo que ha afectado a 18 trabajadores fijos. El gerente del parque, Alberto Gaforio, confirmó ayer este extremo y lo justificó en la necesidad de adaptarse "al nuevo calendario y a la demanda actual". Terra Natura se quedará con 45 empleados fijos y alrededor de 90 fijos discontinuos. El grupo Fuertes, propietario de la empresa agroalimentaria murciana El Pozo, es actualmente el accionista mayoritario del parque de la naturaleza con algo más del 57% de las acciones. Este grupo empresarial inició su andadura en Terra Natura con el 26% del capital social. Colortex, grupo textil valenciano, comenzó con un 61% de las acciones, pero fue reduciendo paulatinamente su participación.

El ERE acometido por el parque temático obedece, según el gerente de la sociedad a la necesidad de adaptarse al nuevo calendario para la próxima temporada, en la que el complejo cerrará de lunes a jueves durante los meses de noviembre a febrero, inclusive, para abrir sus puertas de forma ininterrumpida desde marzo a octubre. "Nos permitirá afrontar con mayor productividad la temporada. El objetivo es fortalecer la cuenta de explotación y derivar más valor añadido a capítulos de gasto con mayor percepción de cara a los visitantes". Gaforio calificó la medida de "traumática", pero agregó que "son decisiones que era necesario tomar".

Desde Terra Natura se toman esta nueva etapa como "un reto para adaptarnos a la nueva demanda" con el objetivo de "poco a poco, ir saliendo de la crisis y optimizando recursos". En ese sentido, Gaforio admitió que al cierre de la temporada se habrá producido una merma de visitantes, que cifró en torno al 5 ó 10%, inferior en cualquier caso al porcentaje de disminución de su vecino Terra Mítica. "No podemos tenr los mismos recursos para una demanda inferior, pero intentamos que el producto no se vea perjudicado y a la vez ir innovando año a año" manifestó el gerente de Terra Natura, que incidió en la necesidad de "restringir los horarios".

De cualquier forma, para el año próximo han notado un incremento en la reserva de visitas escolares. "Eso nos permite, al menos, ser optimistas de cara al futuro" dijo.

Hace un mes se conoció el cierre del Safari de El Verger

Hace pocas fechas se conoció que el Safari Park de El Verger cerraba sus puertas tras muchos años seguidos con una caída de visitantes y deterioro de las instalaciones. Hasta un 60% de clientes perdidos en los últimos seis años, según fuentes de la empresa. El Safari Park, una instalación de referencia desde finales de los años setenta, llegó a contar con 1.500 ejemplares de fauna diversa. El día de su cierre quedaban 460 animales de 70 especies diferentes. Igualmente, trabajaban 23 empleados, que fueron engullidos por un ERE.

A los animales había que buscarles alojamiento y hubo quien pensó que las instalaciones de Terra Natura, de la misma empresa, podían ser una solución. No ha podido ser. Según explicaba el gerente del parque de Benidorm, Alberto Gaforio, "vendrá algún animal, pero no es una solución operativa traer a muchos. Alguno será reubicado, pero es algo complicado". La explicación es sencilla: "No se pueden meter animales que no están previstos en unas instalaciones, han de tenr unas dependencias específicas. No se trata de ganado". Así las cosas, desde Terra Natura "trataremos de enriquecer alguna instalación, pero no es una solución operativa" insistía Gaforio.

Alguno de los traslados complicados será el de los elefantes que quedaban en El verger. Hay que hacerles pruebas de consanguinidad para no encontrar parientes en otros zoológicos de acogida e igualmente han de ser educados para que asimilen el traslado en jaulas ya que se encuentran habituados a vivir en un régimen de semi libertad. Cuando se conoció el cierre quedaban aún muchas especies de grandes dimensiones. Entre ellos hay dos elefantes, tres hipopótamos, dos jirafas, tres búfalos de agua, un tigre tabi y otro blanco, además de 15 de bengala y 14 leones africanos. J. MARÍN