Los vecinos de Finestrat, de Altea y de La Vila Joiosa tendrán que esperar, al menos un año, para recibir asistencia médica de Atención Primaria en unas instalaciones más modernas y adecuadas a las necesidades reales de cada municipio. La Conselleria de Sanidad ha denegado a los tres municipios las subvenciones solicitadas por sus ayuntamientos dentro de una línea especial de ayudas del Consell para la adecuación, reforma o construcción de consultorios auxiliares de la Comunidad, según publicó ayer el Diario Oficial de la Comunidad Valenciana, DOCV.

Poco dinero y falta de requisitos

En el caso de Finestrat, el Ayuntamiento preveía invertir la subvención solicitada para iniciar las obras de construcción del nuevo centro de salud del casco antiguo. Este centro de Atención Primaria iría ubicado en una parcela municipal de la avenida Sierra Cortina -próximo a donde ahora se construye la escuela infantil- y vendría a mejorar la atención sanitaria que se presta en el municipio desde hace años, en un pequeño consultorio del Carrer Nou.

El proyecto elaborado por los técnicos del Consistorio estimaba el coste de su construcción en 634.000 euros y, a pesar de cumplir con todos los requisitos exigidos por el Consell para disponer de subvenciones, se ha quedado fuera por falta de fondos, puesto que la Generalitat tan sólo había consignado 1,2 millones de euros para toda la Comunidad. De hecho, la relación de solicitudes denegadas que se publica en el DOCV sitúa a Finestrat en segundo lugar por puntuación, pero reconoce la falta de asignación presupuestaria para éste y otros ocho proyectos, entre ellos la ampliación de un consultorio auxiliar en Benejúzar o la construcción de un centro de salud en Agres.

Fuentes cercanas al equipo de gobierno de Finestrat, del PP, indicaron ayer que a pesar de no haber logrado fondos de esta línea de ayudas, existe un "compromiso" del Consell para financiar entre un 65 y un 80% del nuevo centro de salud en los presupuestos de la Generalitat para 2011, con el fin de que las obras puedan ponerse en marcha "cuanto antes".

Por lo que respecta a la denegación de ayudas en Altea y La Vila, el Consell justifica su negativa por no haber cumplido ambos ayuntamientos con los requisitos exigidos. En Altea, el Ayuntamiento preveía invertir la subvención en la reforma del actual ambulatorio auxiliar de la Cofradía de Pescadores, en la calle San Pedro, y cuya inversión total estaba presupuestada en 28.254,67 euros, según fuentes municipales. El motivo por el que se deniega la ayuda es que el Ayuntamiento no es titular del local, puesto que se trata de una cesión de la propia Cofradía, y no se ha presentado una memoria del proyecto, aunque Sanidad no atiende al hecho de que la atención sanitaria se lleva prestando en este local a muchos alteanos desde hace cerca de 50 años, recordaron fuentes del Consistorio, gobernado por el PSPV-PSOE.

Por lo que respecta a La Vila, la denegación de esta ayuda trunca uno de los nuevos servicios más publicitado por el actual equipo de gobierno, del PP: la creación de un consultorio auxiliar en la antigua Escuela del barrio de la Ermita. El Consistorio ejecutó la reforma del edificio con el primer Plan E, para convertirlo en un centro social y, además, disponer de un consultorio auxiliar para acercar la atención sanitaria a los vecinos del barrio. No obstante, según el Consell, el Ayuntamiento no disponía del proyecto en regla cuando presentó la solicitud de ayudas.