La juez que instruye la causa relativa al crimen de Polop por el asesinato del que fuera alcalde del municipio, Alejandro Ponsoda, tiene previsto dejar hoy en libertad a cuatro de los seis detenidos que permanecen en prisión por su presunta relación con el caso.

Según señaló ayer el letrado de uno de los imputados, Francisco González, los abogados acudirán hoy a los juzgados de la Vila a la espera de que la juez les comunique el auto de libertad. Aunque la decisión de la magistrada no ha sido oficial, funcionarios judiciales les han citado para darles traslado de la nueva situación procesal de sus defendidos.

Así, está previsto que la juez decrete la libertad bajo de fianza de 12.000 euros para el ex alcalde de Polop, Juan Cano; el dueño del club Mesalina donde presuntamente se fraguó el crimen, Pedro Hermosilla; el encargado del local, Ariel Gatto y uno de los presuntos sicarios, Radim Rakowski. El miércoles por la tarde el empresario del calzado imputado como coautor intelectual del crimen, Salvador Ros, abandonó la prisión de Fontcalent previo pago de 12.000 euros, después de que la Audiencia Provincial de Alicante haya considerado que debía revocarse el auto de prisión para éste, así como para el del segundo posible sicario, Robert Franek, quien no ha podido salir ya que no ha logrado reunir la fianza de 20.000 euros solicitada por la juez. Su abogada ya ha pedido una nueva rebaja de la fianza -en un principio se le pedían 30.000 euros- y ha solicitado que ésta sea efectiva por 3.000 euros atendiendo a las condiciones económicas de su cliente.

El abogado del gerente del club Mesalina, Francisco González, explicó ayer que él ha sido el único que solicitó formalmente la libertad de su cliente tras conocer que la Audiencia había resuelto en dos recursos dejar en libertad bajo fianza a dos de los imputados, que precisamente son sospechosos de los delitos mayores, como es de autor intelectual del crimen en el caso de Salvador Ros, y de autor material del mismo, en el caso de Robert Franek. Según González, existe un "agravio comparativo" que puede ser el que haya llevado a la juez, dice, a redireccionar la situación procesal del resto de implicados. "Si los que están imputados como autores del crimen salen, los que lo están como cooperantes deberían, cuanto menos, estar en la misma situación".

La juez ha decidido que las fianzas sean de 12.000 euros para el caso de los españoles y de 20.000 para los extrajeros. Algunos de los abogados que defienden a los detenidos tildaron de "ridículas" las fianzas en relación a un delito tan grave como el de asesinato y achacan la medida a una falta de pruebas sólidas. Por su parte, el séptimo de los imputados, Raúl Montero Trevejo, primer detenido como autor material del crimen, seguirá en prisión ya que cumple condena de 6 años por un delito anterior.